Uruguay ostenta con orgullo el título del país con el carnaval es el más largo del mundo -se lleva a cabo aproximadamente por unos 40 días-. Ese periodo es el único momento del año en el que los productores de los tablados ponen todo en el escenario para atraer al público, ofrecer buenos espectáculos y lograr una rentabilidad en su negocio que, aseguran, no es sencillo y les demanda estar preparados para enfrentar desafíos diferentes cada día.
Malvín, plaza 1° de mayo, Velódromo y el Monumental de la Costa, son algunos de los principales escenarios carnavaleros. A los que se le suma el tablado que se produce dentro del Movie, un espacio diferente al tradicional.
Para sentar las bases de un tablado como los de Malvín o 1° de Mayo se requieren entre US$100.000 y US$ 150.000 de inversión por una temporada de enero a marzo. Jorge Iglesias está al frente de la operativa de estos tres escenarios y cuenta que en el caso del 1° de mayo es necesario firmar una acuerdo con la Intendencia de Montevideo para hacer uso del espacio, ya que se encuentra en la órbita municipal, mientras que para los demás espacios solo se requiere el pago del alquiler correspondiente. Uno de los objetivos de Iglesias es profesionalizar el carnaval y para eso trabajó en optimizar el escenario y la parte técnica. "Todo lo que pasa en el tablado es responsabilidad mía, desde la comida, los espectáculos que se presentan en el escenario, la parte técnica, los permisos", indicó.
A estos tablados tradicionales, Iglesias le suma también la administración del escenario del Movie. "Fue un cambio grande porque llegamos a gente que no llegábamos", explicó sobre la apuesta para llegar al teatro del shopping. Allí el público busca comodidad, estacionamiento o ciertas prestaciones.
En Daecpu (Directores Asociados de Espectáculos Carnavalescos Populares del Uruguay) se contratan los artistas, ya hay un día prefijado para que los propietarios de los tablados puedan ir eligiendo sus grupos. Los conjuntos de las distintas categorías (parodistas, humoristas, murgas, revistas y lubolos) para cada escenario se eligen cada semana en Daecpu y luego de la definición del concurso los ganadores pueden ir varias veces a cada escenario. "Se compra por semana y así se va definiendo la programación", explicó Iglesias.
En el caso de estos tablados se lleva un promedio de 6 a 7 grupos por noche, con un costo de cada agrupación de $32.000 por presentación.
Pedro Graffigna está al frente del Velódromo junto a dos socios. "Todo es a suerte y verdad y estamos muy dependientes del clima", señaló a Forbes Uruguay. Desde su perspectiva, las ganancias de la temporada no se estiman fácilmente, ya que dependen de muchas causas. "No es una cifra muy alta la que se gana en Carnaval", indicó pero sí hace hincapié en su fuerte convocatoria y arraigo con la gente. "El carnaval y el fútbol son primos hermanos", opinó Graffigna.
Para Alejandro Salkind, propietario del tablado Monumental de la Costa, es clave tomar en cuenta los gustos y necesidades del público, y por ejemplo no hacer jornadas muy extensas, que tengan en cuenta que al otro día el espectador tendrá que ir a trabajar.
Por día en el Monumental de la Costa de domingo a jueves se presentan cinco conjuntos, mientras que los viernes y sábados, se ven seis. Con una capacidad de 2.000 personas, el tablado de La Costa, tiene impronta propia. "Yo hace veinte años que estoy con números positivos", dijo Salkind al evaluar las temporadas completas y a pesar del esfuerzo que conlleva está conforme con esta performance. "Soy carnavalero, significa mucho para mi y tiene una transformación muy importante, por eso quiero darle lo mejor a los artistas y el público", valoró.
Los números del Rey Momo
Los tablados tienen tres grandes ingresos: sponsors, boletería y gastronomía. Los acuerdos comerciales con las marcas varían, algunas ponen productos, mientras que otras pagan un canon para tener presencia.
"Ha aumentado un poco la masividad del Carnaval por su profesionalización" sostuvo Iglesias. Con una capacidad máxima de 2.500 personas, los tablados que gestiona reciben diariamente un promedio de 1.200 personas diarias. Hay una gran relación también entre el público de acuerdo al espectáculo que se brinda. Cambian los productos de mayor o menor demanda. Los días de Murga Joven por ejemplo se vende comida vegana, mientras que cuando actúan los parodistas se vende más cerveza y papas fritas por ejemplo, o chorizos y hamburguesas cuando el ambiente es más familiar, en el caso de las murgas por ejemplo.
Los costos de los tablados van desde $270 a $500 aproximadamente. Los niños asisten gratis hasta los 12 años.
Solo en el tablado del 1° de mayo asisten unas 60.000 personas en todo lo que dura el carnaval. "Es una expresión cultural que gusta mucho*. Para Iglesias hacer tablados no es negocio, para serlo hay que tener mucha creatividad e inventiva. Los demás están subvencionados por lntendencia para que sean rentables. "Mi tablado es rentable pero no para vivir todo el año" , dice Iglesias.
Desde la perspectiva de Iglesias, un tablado puede dejar entre un 12% y 15% de rentabilidad en un año bueno.
En el caso del escenario del Velódromo Municipal, la capacidad es de casi de 9.000 personas. Graffigna indicó que para iniciar la temporada se reservan unos US$ 40.000 para los 35 días de carnaval, sólo para pagar a la Intendencia, a lo que hay que sumar gastos de escenario, sillas, puestos de comida, más los artistas y demás gastos.
En el caso del Monumental de la Costa, la cifra mínima necesaria por día para abrir el tablado es de $200.000. Esto incluye los conjuntos, la técnica, más el personal. "Hay días de números negativos y días positivos. El fenómeno del carnaval está convocando menos que antes y compite con más y otros entretenimientos. Y también la extensión de la temporada", explicó Salkind.