Unos US$ 40 millones es la cantidad embolsada por Will Smith por su última película, El método Williams (King Richard), en la que interpreta al padre de Venus y Serena Williams, quien, con un entrenamiento duro y poco ortodoxo, logró convertirlas en dos de las mejores tenistas de la historia.
Gracias a la suma que le ha reportó el filme, que también le valió su primer Globo de Oro, el actor se coloca en el tercer puesto del ranking de intérpretes que más cobran por película (junto a Denzel Washington, y por detrás de Daniel Craig y Dwayne "The Rock" Johnson, que son el primero y el segundo respectivamente). Sin embargo, este suculento salario no ha ido a parar entero en su cuenta del banco. Según informó The Hollywood Reporter, el actor decidió usar una buena parte para pagar bonos a sus compañeros de reparto con sueldos menores.
En 2020, también se coló en la lista Forbes de las celebrities mejor pagadas del mundo (una lista que incluye famosos de todos los sectores). Ese año habría cobrado US$ 44,5 millones, lo que le llevó al puesto 69. Según la edición estadounidense de FORBES su aparición en la lista se debía al nuevo enfoque que le ha dado a sus redes sociales desde 2017. Desde entonces, se embolsa millones a través de Instagram, YouTube y TikTok (aunque no lo suficiente como para estar entre los 10 que más cobran de estas redes).
Desde sus inicios Smith ha sabido diversificar su negocio. Además del cine, siempre ha tenido la música. De hecho, fue así como empezó y su talento con las rimas lo que le catapultó a la fama a una edad muy temprana. Pero, aunque está llena de grandes éxitos, la historia de su vida también cuenta con momentos bajos.
El joven rapero, que se había hecho millonario a los 18 años, quedó en la quiebra en 1989, tras ser embargado por la agencia estadounidense de recaudación de impuestos. Aquí fue cuando decidió probar por el camino de la interpretación, y el personaje que le llevó al estrellato no necesita presentación.
La emisión del piloto de El príncipe de Bel Air fue el 10 de septiembre de 1990. Poco tardó en conseguir el éxito en todo el mundo y en consolidarse como una de las series más icónicas y populares de los años 90. En total, se transmitieron 148 episodios, el último el 20 de mayo de 1996, repartidos en seis temporadas. Algunos medios estadounidenses apuntan a que el actor cobró en torno a US$ 2,8 millones por las tres primeras temporadas de la serie (que tuvo seis), pero que los usó para pagar impuestos que debía.
La cumbre de su carrera como actor la alcanzó en 1995 con Bad Boys. Después llegaron otros éxitos de taquilla como Independence Day (1996), que se considera su segunda película más taquillera hasta la fecha con una caja de unos US$ 800 millones; Men in black (1997), que recaudó US$ 578 millones; y Enemigo público (1998), que consiguió US$ 250 millones.
Smith rechazó el papel de Neo en Matrix, película que se estrenó en 1999, el mismo año que Wild Wild West, protagonizada por el actor afroamericano. Todos conocemos el éxito de la primera, aunque quizás no las cifras: costó US$ 63 millones y recaudó US$ 460 millones. La segunda, US$ 170 millones y US$ 222,1 millones respectivamente, este balance hace que esté considerada como una de las películas más caras de la historia.
En 2001, protagonizó Ali, la película biográfica que cuenta la historia del icono del boxeo Muhammad Ali que le otorgó su primera nominación a los Premios Oscar como Mejor Actor. Y a partir de aquí le han llovido los premios. Después vino lla segunda entrega de Men In Black (2002). Unos años más tarde, en 2006, con En busca de la felicidad (2006), en la que trabaja junto a su hijo Jaden Smith, consiguió su segunda nominación a los Premios Oscar como Mejor Actor y la primera a los Globos de Oro como Mejor Actor Dramático.
Men in Black III, estrenada en 2012, conquistó a los espectadores y se situó como la película más taquillera de la saga, con una recaudación de US$ 624 millones. Además, en 2019 se estrenó Aladdín, la que hasta ahora se considera su película más taquillera, con una recaudación de más de US$ 1.000 millones.
Y entre tanto rodaje, estreno, premios (y hacer caja), Smith no se olvidó de su música. Lanzó su primer disco en 1997: Big Willie Style, del que algunas canciones se posicionaron en los primeros lugares de importantes listas de música mundiales. A este le siguieron otros tres álbumes de estudio: Willenium (1999), Born to Reign (2002), y Lost and Found (2005).
En 2017, Smith dio un giro a sus redes sociales y ahora recauda millones a través de Instagram, YouTube y TikTok. Durante la pandemia, firmó un acuerdo con Snapchat para la serie Will from Home. Pero más allá de esta espectacular carrera frente a las cámaras y los micrófonos, el actor también es empresario e inversor.
En busca del beneficio y del cambio
Smith, junto a su hermano Harry, es propietario de Treyball Development Inc., una sociedad de la industria del entretenimiento con sede en Beverly Hills y bautizada así por su primogénito, Trey Smith (hijo de su primera mujer, Sheree Zampino).
Will y su actual pareja, la también actriz, Jada Pinkett Smith dirigen Westbrook Inc., compañía que ha trabajado en producciones cinematográficas y televisivas como King Richard, así como en el programa de entrevistas de Facebook Red Table Talk y en una serie de títulos muy vistos en Snapchat y otras plataformas digitales.
Asimismo, el actor se unió a Keisuke Honda para poner en marcha Dreamers VC, un fondo de capital riesgo que une inversores corporativos japoneses con trayectoria con empresas estadounidenses en etapa inicial. Así, la sociedad invierte en empresas innovadoras, junto con inversores líderes de primer nivel, con el objetivo de mejorar vidas mediante la aplicación de tecnología emergente.
"Cuando corresponde, apoyamos la expansión conectando a las empresas con nuestra red global de capital y socios estratégicos. Por lo general, realizamos nuestra primera inversión en una ronda Seed, A o B, y mantenemos el capital de seguimiento para las etapas de crecimiento de nuestras inversiones", se puede leer en su página web.
La versión estadounidense de Forbes también realizó en 2020 un ranking de los cincuenta inversores con mayor impacto (social, medioambiental, educacional?) que quieren marcar auténticas diferencias en el mundo reinvirtiendo sus fortunas. Entre ellos, se encontraban Will y Jada, por ser parte de los inversores de Quidnet Energy, una compañía que desarrolla sistemas de almacenamiento para el exceso de electricidad de sistemas de energía renovable.
Íntimo de Pablo Motos
El pasado mes de agosto, Pablo Motos, presentador de El Hormiguero y gran amigo del actor ?como el mismo ha reconocido?, confesaba en el programa de YouTube El sentido de la birra conducido por Ricardo Moya que Smith y él llegaron a hacer una empresa y estuvieron «a punto de vender El Hormiguero» en Estados Unidos.
Finalmente, no consiguieron que el proyecto saliese adelante: la NBC consideró que la sección de ciencia estaba muy vista en la parrilla televisiva estadounidense y tenían sus reservas en cuanto a Trancas y Barrancas, porque veían a las hormigas como personajes demasiado infantiles.