La muestra Louvre Couture. Arte y Moda: Piezas Emblemáticas es la primera de esta temática organizada por el Museo del Louvre y presenta piezas de alta costura y accesorios de 45 casas de moda de renombre mundial.

El "curador senior" de patrimonio del museo, Olivier Gabet, experto en la conservación, investigación y gestión de colecciones, junto a Marie Brimicombe, fueron los responsables de dar forma a esta impresionante exhibición, cuyo objetivo es explorar las conexiones con la colección de obras maestras del Louvre.

La alta costura creada por algunos de los diseñadores más influyentes del mundo invita a los visitantes a realizar un viaje visual por la historia de la moda contemporánea desde 1960 hasta 2025. 

La muestra incluye piezas de Alexander McQueen, Azzedine Alaïa, Balmain, Chanel, Chloé, Cristóbal Balenciaga, Dolce & Gabbana, Dries Van Noten, Gareth Pugh, Hubert de Givenchy, Jean Paul Gaultier, JW Anderson, John Galliano, Moschino, Prada, Thom Browne, Iris van Herpen, Loewe, Rabih Kairouz, Versace, Viktor & Rolf y Vivienne Westwood.

Más de cien looks y accesorios forman parte de la exhibición, con piezas prestadas por 45 de las casas y diseñadores más emblemáticos de la moda. Cada prenda fue seleccionada cuidadosamente por su resonancia intelectual, emocional o poética con la historia de las artes decorativas, así como por su artesanía y ornamentación excepcionales.

Se establecen comparaciones visuales entre piezas de alta costura y joyas históricas, vestimentas, tapices, muebles y objetos de arte que las inspiraron.

También se exhiben miniaturas medievales en oro y marfil, tapices renacentistas, lujosas habitaciones del siglo XVIII y una colección de armaduras. La curaduría de la muestra permite un intercambio entre la moda y los objetos históricos del Louvre, ofreciendo una mirada al proceso creativo de los diseñadores más influyentes del mundo.

La presidenta y directora del Museo del Louvre, Laurence des Cars, explicó: "Las conexiones e influencias reveladas por esta innovadora exposición demuestran la profundidad histórica, artística y poética de la relación entre la moda y las artes decorativas. Además, los visitantes descubrirán una nueva forma de acercarse a algunas de las grandes obras maestras del Louvre, desde Bizancio hasta el siglo XIX, a través de los ojos de los diseñadores de moda actuales".

Tal como afirmó Paul Cézanne, "el Louvre es el libro del que aprendemos a leer", y este legendario museo fue una fuente inagotable de inspiración para artistas y diseñadores durante siglos. Un claro ejemplo es Karl Lagerfeld, quien se inspiró especialmente en las colecciones de Artes Decorativas del Louvre. 

Su colección de Alta Costura Primavera/Verano 2019 de Chanel está representada en la exhibición con un saco bordado por Lesage con un patrón decorativo inspirado en una cómoda del siglo XVIII del Louvre, y una falda bordada con plumas de avestruz por Lemarié Patrimoine de Chanel, París.

A lo largo de la exposición se pueden ver múltiples conexiones entre la obra de los grandes diseñadores y la historia del arte, reflejando la relación inquebrantable entre moda y arte. El curador Olivier Gabet explicó la influencia de las colecciones del Louvre en los diseñadores presentes en la muestra: 

"Karl Lagerfeld diseñó un impresionante saco para Chanel en 2019, con bordados de Lesage, inspirado en un patrón tomado de una cómoda de Mathieu Criaerd en vernis Martin azul y blanco. Otras veces, el diseñador se rodeó de tantos objetos que terminó viéndolos como inspiraciones naturales y evidentes, como los motivos ornamentales de André-Charles Boulle, que aparecen en un saco de Hubert de Givenchy", señaló el experto.

"Muchas veces son los vientos de la Historia, que transportan susurros y fantasías, los que llegan al oído de un diseñador: así como las artes decorativas del Renacimiento italiano influyeron en Maria Grazia Chiuri en Christian Dior, la arquitectura gótica en Iris van Herpen, los bustos relicarios en Daniel Roseberry y Schiaparelli, las armaduras en Demna y Balenciaga, los tapices medievales en Marine Serre y Dries Van Noten, la cerámica de Bernard Palissy en Matthieu Blazy y Bottega Veneta, y también en Alexander McQueen. Asimismo, las artesanías del siglo XVIII marcaron a John Galliano, Nicolas Ghesquière y Christian Louboutin. Y quizás una mezcla de todas estas influencias jugó su papel en los casos de Jonathan Anderson, Versace, Dolce & Gabbana y Vivienne Westwood. Algunas de estas conexiones fueron seleccionadas con más libertad, pero no por ello son menos acertadas. Los museos son casas de conocimiento, pero también lugares de deleite y disfrute", reflexionó Gabet.

Excepto por los mantos de la Orden del Espíritu Santo, restaurados por el museo el año pasado, el Louvre no conserva vestimenta. Sin embargo, la ropa está representada en numerosas obras a lo largo de las galerías, desde bajorrelieves de la Antigüedad hasta pinturas del siglo XVIII. Además, los textiles forman una parte importante de la colección del Departamento de Artes Decorativas, con especial enfoque en tapices y tejidos ornamentales.

La escenógrafa Nathalie Crinière diseñó el recorrido de la muestra para invitar a los visitantes a sumergirse en el universo de la moda y el arte, permitiéndoles recorrer libremente las galerías y descubrir cada pieza de alta costura a su propio ritmo. Las creaciones se exhiben agrupadas por períodos históricos, como Bizancio, la Edad Media y el Renacimiento, según su relación con las colecciones del museo. Por ejemplo, las salas del Consejo de Estado muestran la influencia de las creaciones artísticas del Gran Siglo, mientras que en los salones de época, la última parte de la exposición se centra en los excesos del siglo XIX, culminando en la grandeza de los Apartamentos de Napoleón III con diseños de alta costura igualmente suntuosos.

Se establecen conexiones visuales directas entre algunos de los diseños de moda más icónicos y los tesoros del museo, como el famoso gabinete de André-Charles Boulle con "El carro de Apolo" (circa 1700), que influyó en la colección Otoño/Invierno 1990-1991 de Hubert de Givenchy. El curador Gabet explicó: "La magnificencia y excelencia de la artesanía tradicional inspiraron su colección Otoño/Invierno 1990-1991, un homenaje a la calidad y el lujo. Un traje pantalón en brocado de seda con bordados de Lesage es una de sus piezas clave. El conjunto refleja directamente la marquetería en cobre y carey del gabinete, inmortalizado en una serie de fotografías que ilustraron la portada del libro 'Le Style Givenchy' de Françoise Mohrt en 1998".

De ese modo, la muestraLouvre Couture. Arte y Moda: Piezas Emblemáticas es un recorrido mágico por la historia de las artes decorativas y la moda, que demuestra la influencia perdurable del arte en los diseñadores y reafirma la alta costura como una forma de arte en sí misma.

Se podrá recorrer en el Museo del Louvre hasta el 21 de julio de 2025.

Nota publicada en Forbes US.