Henry Jackson es inglés, le apasiona el fútbol y desde que conoció la Argentina, en 2018, dice que “se enamoró” del país. Su trabajo como embajador de la marca de whisky Chivas Regal lo trajo a Buenos Aires nuevamente en septiembre del año pasado, en la previa del Mundial. Y como uno más entre los 4 millones de hinchas que salieron a festejar la conquista argentina de la Copa del Mundo después de la final contra Francia, Jackson cantó y gritó hasta la afonía. No solo al compás del clásico Muchachos; también, y sin ningún reparo, se sumó entre la multitud al hit que quedó marcado a fuego desde el partido contra Inglaterra, en 1986: "Y ya lo ve y ya lo ve, el que no salta, es un inglés".
Cuando sus amigos en Inglaterra vieron las fotos y los videos que publicó en Instagram, confiesa que tuvo que dar explicaciones. “Pero ellos saben de mi amor por la Argentina y entendieron. Creo, además, que estaban un poco celosos. Yo estuve aquí y viví la Copa del Mundo de Messi, en pleno verano y con toda la locura que fueron los festejos. Ellos estaban allá, en invierno y mirando las imágenes del Obelisco”, dice entre risas, y asegura que, salvo por los franceses, el resto del mundo alentaba por la camiseta albiceleste.
Como embajador local de la casa escocesa que nació con los hermanos James y John Chivas, que abrieron su primer negocio de licores en 1843, Jackson se propone romper con algunos moldes que aún persisten en la atmósfera que rodea al whisky. Como fiel representante de la Generación Z, con apenas 23 años, en las catas que él dirige predominan las historias contadas con humor. Su discurso espontáneo, genuino y sus recomendaciones bien pragmáticas. “Hay mucho conocimiento sobre el whisky en la Argentina, pero también un perfil de consumidor que es bastante tradicional, que sigue con la impresión de que el whisky es una bebida fuerte y que solo se toma en solitario una medida a la noche. Pero hoy sabemos que es una bebida que se comparte en muchos otros momentos, con amigos, en un trago o como un aperitivo -menciona Jackson-. También se suman cada vez más mujeres, influencers que comparten muy buen contenido en las redes sociales, como @minaswhisky, y eso es muy importante para sumar la diversidad de voces en una comunidad cada vez más grande”.
Con agua, hielo o gaseosa
Cada vez que alguien le dice que prefiere alguna otra bebida destilada que no sea “tan fuerte” como el whisky, Jackson entra en acción. Romper con los estereotipos es uno de los desafíos que más lo motivan. Asegura, además, que no hay una manera “correcta” de tomar el whisky. Porque si hace calor como sucedió durante todos estos días, Jackson aconseja tomarlo con hielo para que sea más refrescante.
Cambiar la mentalidad del clásico consumidor. Demostrar que el whisky no es una bebida a la que hay que temerle. “En una cata, por ejemplo, solo hay que agregar unas gotas de agua para desprender los sabores del whisky, y eso cambia mucho el perfil. También prepararlo en un trago, porque la gente sigue pensando en un whisky que debe tomarse solo -dice el embajador de Chivas en un perfecto español-. Muy a menudo, cuando alguien me dice que es demasiado fuerte le ofrezco un Penicillin, que es mi trago favorito. Lo prueban y siempre quedan sorprendidos”.
¿Cómo es el Penicillin?
Se prepara con Chivas Mizunara, añejado en barricas japonesas de roble mizunara, que le aportan una gama de discretos sabores aromáticos a la mezcla. Tiene un aroma afrutado, a pera y naranja. En el paladar suave, con el dulzor de la miel y un toque de avellana. Y el acabado, algo picante. El Penicillin lleva 60 ml de Mizunara, 30 ml de jugo de limón, 3o ml de almíbar de miel, 2 o 3 monedas de jengibre y se decora con un gajo de limón. Tengo dos amigas que me juraban que no les gustaba el whisky, y ahora cada vez que vamos a un bar piden un Penicillin. Siempre.
¿Es parte de tu trabajo educar al consumidor?
Si, es una parte muy importante de mi trabajo. Pero la palabra educar suena bastante formal. Yo diría que más que educar trato de que la gente conozca el producto, que tenga una experiencia interactiva y divertida, donde haya un ida y vuelta, donde el consumidor pregunte todo lo que quiera saber.
¿No hay límites en la experimentación? ¿Se puede tomar whisky con hielo saborizado, por ejemplo?
Si querés mezclar un whisky de 18 años con hielo saborizado, o con Coca Cola, está bien. La gente, a veces, se ofende cuando ve un whisky de 18 años con cola, pero es solo una cuestión personal. Durante la capacitación que recibí, pase tiempo con el mezclador principal de Chivas y Ballantines. Él me enseñó cómo se le responde a los consumidores que preguntan si se puede mezclar un whisky de 15 años en un trago. Se les dice: 'Si, obvio. Porque si el whisky es de buena calidad, porqué no mezclarlo si te gusta el buen whisky y los tragos?'
¿Crees que series como Mad Men [donde en el primer capítulo Don Draper se pide un Old fashioned] tienen influencia en renovar la vigencia de un clásico?
Sin dudas. También demuestra que a pesar de la experimentación y de las modas, se puede mantener un estilo simple. Es un trago que tiene un perfil bastante fuerte y dulce al mismo tiempo. Lo recomiendo con un Ballantines 7, porque es un whisky escosés que tiene buen finish. Un whisky que se añeja los últimos años en barricas de bourbon de Estados Unidos, que son dulces y se complementa muy bien con el azúcar del Old fashioned. También conozco gente que comenzó a tomar whisky por primera vez por la serie Peaky Blinders. En ese caso es whisky irlandés. Chivas es escocés. Pero sí, las series han acercado a los consumidores.
¿Y cuál es la tendencia actual?
Hay una gran tendencia en los diferentes tipos de añejamiento en barricas. La influencia de las barricas representa entre el 60 y 65% del sabor final del whisky. Así que hay mucha oportunidad de experimentar con los sabores, con las barricas. En nuestro caso, el Chivas XV tiene un acabado selectivo en barricas de coñac. Y en la Mizunara, del que hablé antes, tiene un acabado selectivo en barricas de Mizunara de Japón, entonces sí hay mucha experimentación en esta área. De hecho, se vienen whiskies muy innovadores a la Argentina. No puedo decir nada pero llegarán la semana que viene.
¿Por qué crees que la gente se anima más a tomar otros destilados como el gin, que está muy de moda?
Hay dos cosas. La primera es que la gente piensa que el gin es menos fuerte que el whisky. Si te fijás en las botellas de Chivas y Ballantines, casi todas dicen 40% de graduación. En algunas marcas de gin llegan hasta el 45%. También hay otra cosa, y es que muchos consumidores, me refiero sobre todo a los de la generación Z, son muy obsesivos con el tema de la salud. Piensan que los licores claros son más sanos que el whisky, que son más oscuros. Tienen razón hasta cierto punto, porque los ingredientes que se utilizan en la producción del gin son naturales, pero la verdad es que todo es alcohol, y de una graduación alta.
¿Un turista en Escocia qué debería visitar?
La región de Speyside, sin dudas. Porque si bien el whisky se produce en toda Escocia, esta quizás es la más importante. Allí hay dos destilerías de la marca que son como el corazón de esta bebida. Strathisla es la destilería más antigua de la región. Además, la región es hermosa, tiene ríos, bosques y colinas. Se puede conectar mucho con la naturaleza.
¿Cuál es tu opinión sobre la coctelería actual en Buenos Aires?
Gran parte de mi laburo es mantener relaciones con los bartenders. Entonces, por suerte, conozco profesionales que trabajan increíble. La ciudad tiene una oferta muy buena, hay una gran variedad de bares y son muchos los que están llenos de gente. Oscar Jack y su equipo de Nicky Harrison están haciendo cosas maravillosas. También me gustó mucho un nuevo lugar que se llama SOFÁ, de Sabrina Traverso y Agustina Helena. Experimentan mucho con los tragos, muy buena onda. Ariel Figueroa, de Doppelganger Bar también está en San Telmo. Lo que me gusta de ese lugar es que no suelen dar la carta a los clientes. Te preguntan qué te gusta, qué sabores preferís y crean algo personalizado. Hay muchos otros que debería nombrar y no quiero que se enojen, porque son demasiados los que hacen un gran trabajo.
¿Por qué te enamoraste de la Argentina?
Llegué por primera vez en 2018. Fue durante mi año sabático que vine acá para enseñar inglés en una escuela y me quedé viviendo con una familia en Luján. Me enamoré del país y de las costumbres. Demasiadas cosas. Empezamos por las facturas, el dulce de leche, el mate, el Fernet. ¡Uy, no, Fernet no! [suelta una carcajada]. Pero lo que realmente me cautivó fue la gente. Acá te cruzás con alguien en la calle que no conocés y de repente te saluda. Porque sí. Es algo impensado en Inglaterra. Los argentinos son amigables, abiertos. Después, estudié en Inglaterra idiomas extranjeros, español y francés. Pero hice mi tesis sobre Argentina y el fútbol. Luego tuve la entrevista con Pernod Ricard y había un programa internacional en el que me preguntaron dónde quería trabajar. Había once países, y por supuesto me postulé para Argentina. Soy el embajador de la marca hasta 2024, pero siento que el tiempo pasa demasiado rápido y no quiero que llegue el momento de partir”.
Para que no haya tanto recelo, Jackson aclara que le encanta Inglaterra. “Londres es hermoso. Pero haber estado festejando en el Obelisco con otras 4 millones de personas fue increíble. La verdad, fue uno de los días favoritos de mi vida”, concluye.
Tres recetas, por Henry Jackson
- Chivas 12 Highball: “Verté 1 parte de Chivas 12 o Chivas Mizunara en un vaso alto. Agregá 1 y 1/2 parte de soda y luego llená con hielo lentamente el vaso hasta la parte superior. Sumá la soda restante y revolvé lentamente para asegurarte de que esté mezclada. Completá con un poco más de hielo para asegurarte de que esté lleno y compacto, y decorá con una rodaja de naranja”.
- Old Fashioned: “Vas a necesitar 1 parte de de Chivas (cualquier mezcla), 2 gotas de bitter de Angostura, una cucharada de jarabe de azúcar y cáscara de naranja, para decorar. Vas a poner todos los ingredientes en una coctelera con hielo. Colocar la preparación en un vaso 'on the rocks' con un gran bloque de hielo”.
- Penicillin: “En una coctelera, colocar 3 o 4 rodajas de jengibre junto con ½ parte de almíbar de miel. Luego de pisarlas, vamos a sumar 1 parte de Chivas Mizunara y media parte de jugo de limón. Servir en un vaso corto con mucho hielo y decorar con gajo de limón”.
