Gaucho Group Holdings, un lujo argentino de exportación
Florencia Radici Forbes Staff
Florencia Radici Forbes Staff
Empresas como Gaucho Group Holdings, una compañía que incluye plataformas de comercio electrónico de vinos, bienes raíces de lujo y artículos y accesorios de cuero, han ayudado a generar productos de lujo de Argentina en el espacio internacional. Gaucho - Buenos Aires fue pionera al crear una de las marcas de moda de alta gama más recientes. Con Lautaro García De La Pena como director creativo, la marca cuenta con moda prêt-à-porter y accesorios de cuero basados en técnicas artesanales tradicionales con un toque moderno.
En julio, inauguró su boutique insignia en el Design District de Miami, junto a otras brands de lujo como Off White, Bottega Veneta, Gucci y Chanel. La tienda es una parte integral de la estrategia de la empresa para que los clientes experimenten la calidad de la marca y de la línea de decoración para el hogar, Gaucho Casa, y es además fuente de referencia para presentar los otros negocios de estilo de vida de lujo de Gaucho Group Holdings, como los vinos artesanales de Argentina Algodon Fine Wines y el hotel boutique de Recoleta, Algodon Mansión.
En sus planes está el lanzamiento de un nuevo Black Label Malbec y Pinot Noir, y también un Gaucho Chardonnay. Según Allied Market Research, el mercado mundial de vinos y licores de lujo movió US$ 970 millones en 2019 y se espera que alcance los US$ 1.410 millones para 2027. Los vinos de Algodon se producen en Algodon Wine Estates, una bodega boutique en las laderas de la Sierra Pintada en Mendoza. Es una de las únicas que elaboran vinos a través de la microvinificación.
En una entrevista exclusiva con Forbes Argentina, Scott Mathis, CEO de Gaucho Group Holdings, cuenta cuáles son los próximos planes y por qué considera que la Argentina tiene tanto potencial más allá de la coyuntura actual.
- ¿Qué balance hacen de la apertura?
- Pusimos a Gaucho en el corazón de la que probablemente, para mí, sea hoy una de las principales ciudades del mundo. Tuvimos muy buena recepción no solo de la indumentaria, sino también de la línea de hogar. Estamos muy orgullosos. Es la primera tienda que abrimos, no solo en Estados Unidos, sino en el mundo.
- ¿En qué otras ciudades querrían estar?
- Me gustaría ver a Gaucho en todas las grandes capitales de la moda del mundo, como París, Los Ángeles, Nueva York, Milán, Londres, Berlín, Copenhague, Tokio. Entre esas ciudades diría que seguramente vayan a estar las próximas ocho tiendas. Dependerá de lo que pase en cada país –por ejemplo, hace poco vimos cómo se cayó la libra esterlina–. Así que está atado a eso. Pero lo que también haremos para promover la marca es pop ups, por ejemplo, en Austin, Aspen o Ibiza. Así vamos a crecer.
- ¿Cuál es la estrategia de Gaucho Group?
- De alguna forma, seguimos el manual de LVMH, que comenzó con artículos de cuero y se expandió a todo tipo de bienes y experiencias de lujo. O como hizo Ralph Lauren, que hoy tiene restaurantes y cafés. Aunque todavía somos más bien chicos, nos gustaría ser el LVMH de Sudamérica, empezando por Argentina, que es donde están nuestras raíces y donde hay oportunidades. Tenemos nuestro hotel boutique en Recoleta y la producción de vinos en Mendoza. Vamos a construir un hotel en Mendoza, cinco estrellas, súper lujoso, relacionado a la temática de Gaucho. Estamos diseñando la propiedad.
- ¿Cómo se te ocurrió la idea de crear esto?
- Durante la última década, vi mucha gente de Estados Unidos y Europa visitar Argentina y realmente les gustaba mucho. Además querían comprar bienes de cuero, como camperas, botas o carteras. Saben que Argentina es reconocida por sus artículos de cuero, que además son accesibles. Entonces investigué y vi que ninguna marca estaba realmente yendo a otro nivel. ¿Por qué Italia dio origen a 50 marcas de lujo que están por todo el mundo y Argentina no?. No tiene sentido. Así que decidí crearla, y qué nombre mejor que Gaucho, ¿no?.
- ¿Cómo viene el desarrollo de los vinos?
- Los vinos están espectaculares. Hicimos grandes inversiones en los viñedos, en la bodega y hasta en la fuente de agua. Acabamos de hacer un blend de uvas blancas que llegará al mercado en 2023. Estamos trabajando también con Malbec y con Bonarda, una cepa que no es tan conocida en el mundo. Planeamos hacer un vino Gaucho que sea 70% Malbec y 30% Bonarda, y también un Chardonnay. Esto se va completar con el hotel súper lujoso. Tenemos el espacio para hacerlo, con golf, habitaciones con piscina privada, canchas de tenis y la posibilidad de hacer actividades y tener experiencias más allá de visitar la bodega.
- ¿Analizan adquisiciones? ¿Qué miran en las potenciales marcas?
- Sí, sin dudas lo analizamos. Y lo más importante son las personas detrás de las marcas, porque si compráramos una marca querríamos traer a las personas para que puedan ayudarnos a mover esa marca a una escala global. Siempre me pregunto por qué Argentina no tiene más marcas de lujo globales. No tiene sentido. Nuestra meta es abrir el mercado y llevar los productos al mundo.
- ¿Qué tendencias ves en el mercado de lujo?
- La pandemia despertó a las personas en términos de temas como calidad de vida y experiencias. ¿Queremos seguir nuestra vida así o disfrutarla? Acabo de llegar de un viaje por Europa y estoy asombrado de lo que vi. Había filas frente a las tiendas de marcas como Rolex. Me acuerdo hace unos años cuando se vaticinó el fin del mercado de los relojes de lujo. El mundo pide y necesita lujo. Además, muchas personas hacen estas compras como una forma de invertir y diversificar por fuera de su moneda. El mercado de lujo va a continuar creciendo, porque además hay cada vez más millonarios. A eso se suma que en épocas económicas turbulentas, como ahora, son los que menos se ven afectados.
- ¿No te asusta la volatilidad?
- A mi edad me gusta crear oportunidades, y lo que veo en la Argentina es que hay muchísimo talento y posibilidades para crear negocios globales. Seguiremos contratando y construyendo. Hay una enorme oportunidad para las empresas extranjeras que quieran venir a hacer negocios. Tengo una alta tolerancia al dolor y, desde el punto de vista económico, llevo la contra. Es verdad que las cosas no son fáciles acá y muchos se asustan. Me gusta hacer negocios acá, me gusta la gente. Trabajé mucho tiempo en Wall Street, así que estoy acostumbrado al riesgo. En Argentina, el riesgo versus la recompensa vale la pena.