Mientras esta semana se inicia un nuevo estado de emergencia en la República Checa para combatir la propagación del Covid-19, los residentes de Praga hacen fila para probar el “pastel de virus” que se ha convertido en furor en la ciudad.
En la calle Celetná, el corazón del histórico distrito de la Ciudad Vieja, el café Black Madonna de Praga se ha estado vendiendo con un dulce que se parece mucho al nuevo coronavirus.
Los clientes pueden encontrarlo en la vitrina de los postres, detrás de una pequeña tarjeta que simplemente dice "virus". Está cubierto de chocolate, con relleno de pistacho y frambuesa, y es aproximadamente del tamaño de una pelota de tenis.
"Encontré una foto del virus en Internet", dijo a Reuters Olga Budnik, creadora del postre. Su confección inspirada en el coronavirus ha sido un gran éxito, con ventas de tres dígitos cada día y en aumento.
En tiempos normales, el popular café estaría lleno de turistas. El espacio de diseño cubista ocupa la planta baja del edificio de la Casa de la Virgen Negra, que fue diseñado en 1911 por el arquitecto modernista Josef Go?ar. El edificio también alberga el Museo Checo del Cubismo.
Budnik dijo a Reuters que inventó el postre para ayudar a combatir la caída de los negocios impulsada por la pandemia, justo cuando su país lucha contra una de las tasas más altas de infecciones por coronavirus en Europa.
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El mes pasado, el primer ministro checo, Andrej Babis, admitió que alivió las restricciones al coronavirus demasiado temprano en el verano. “Puede que me haya dejado llevar”, dijo en un discurso televisado el 21 de septiembre.
Con la esperanza de convertir un éxito en otro, la creadora de este postre le confesó a esta agencia que ya está pensando en su próxima obra maestra de repostería: un dulce con temática de vacunación contra Covid-19 que debería saber a cítricos y licor. “Tendrá mucha lima con un poco de alcohol”.
Autora: Suzanne Rowan Kelleher.
La nota en inglés acá.
