La temporada 2022 del golf disputó su último major del año. The Open Championship en el Old Course de St. Andrews, considerado el mejor green de Europa, se desarrolló entre el 14 y el 17 de julio. Y en este spot único de Escocia estuvo Rolex. Fue el patrocinador de la 150ª edición de este torneo histórico donde se consagró campeón el australiano Cameron Smith con un total de 268 golpes.
Escenario de algunos de los momentos más memorables del golf, St Andrews pone en escena a los mejores jugadores de este deporte desde que fue sede de The Open por primera vez en 1873. En esta edición del torneo más antiguo del mundo participaron los mejores golfitas del momento, como Matthew Fitzpatrick y Scottie Scheffler, ambos testimoniales de Rolex.
Reconocido por sus golpes ciegos, sus calles anchas y sus extensos greens, St. Andrews exige precisión. Para tener éxito, los jugadores deben enfrentar los desafíos que presentan sus links moldeados por la naturaleza, además del clima imprevisible. Tanta exigencia hace que el título de campeón en el Abierto Británico signifique la coronación de una carrera. Como es el caso de Smith, de 28 años, quien consiguió su primer major, lo que implicó su salto definitivo al estrellato
Además, no hay otro lugar en el que el deporte actual y la historia se entrelacen con tanta armonía. "Es posible que me lleve años apreciarlo plenamente, pero me inclino a creer que ganar el Abierto Británico en la cuna del golf es el logro más importante en este deporte", aseguró Tiger Woods, testimonial de Rolex, tras ganar el torneo en el 2000. Jack Nicklaus, que ostenta un récord de 18 victorias en majors, considera que ganar en estos links sagrados representa la cúspide: "Si un jugador de golf quiere ser recordado, debe ganar el Abierto Británico en St Andrews".
EXCELENCIA
Rolex significa mucho más que una empresa que elabora relojes de lujo; es también una marca global reconocida como estándar de calidad, exactitud y excelencia. Valores que comparte con el golf, con el que desarrolló una fuerte alianza que ya cuenta con más de medio siglo. El inicio de esta unión se selló en 1967 mediante un pacto de caballeros. Arnold Palmer, Jack Nicklaus y Gary Playe, "los tres grandes del golf" de aquel momento, se convirtieron en los primeros embajadores de Rolex en este deporte. El trío de lujo fue pilar fundamental del apoyo de la marca al golf. A pesar de ser adversarios en el campo, su relación se caracterizó siempre por la admiración, el apoyo y el respeto mutuos.
Desde aquel entonces, la empresa relojera está siempre presente, junto a los jugadores de élite y las leyendas del deporte, tanto en los principales torneos como en los principales tours profesionales y campeonatos amateur del mundo. "Rolex desempeñó un papel integral en la rica historia del Abierto Británico -aseguró Ian Pattinson, Presidente del Consejo de The Royal & Ancient Golf Club, ente organizador del evento-. Sin lugar a dudas, la asociación entre The R&A y Rolex, que se consolida año tras año, ha respaldado activamente el crecimiento del deporte moderno y promovido su desarrollo en todo el mundo. Creemos y confiamos en que esta asociación continuará en los años próximos".
El vínculo de Rolex con el golf hoy sigue más vivo que nunca. Deportistas y marca relojera comparten la ambición por alcanzar la excelencia y el máximo rendimiento. La colaboración de la empresa suiza con este deporte es continua y se traduce en invertir tanto para darle impulso a los jóvenes y emergentes como apoyar a los campeones consagrados. La meta es lograr el perfeccionamiento continuo con la vista puesta en la innovación, sin dejar de lado el respeto por la tradición y la experiencia