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¿Qué motiva a un CEO a tatuarse? ¿Qué parte del cuerpo eligen? ¿Les importa que se vea? Un recorrido por algunos de los pedidos más frecuentes (y extraños) de este segmente corporativo.

11 Diciembre de 2023 14.09

Martín se sienta cómodamente en el sillón. Está a punto de tatuarse. Después de saludarla, mira a Amanda Rodríguez Oropeza, su tatuadora, a los ojos. Ambos saben lo que van a hacer en los próximos minutos. Ya lo hablaron de antemano. Así que, si todo sale bien, Martín saldrá del local con un hermoso billete de cien dólares tatuado en su brazo. 

La historia de Martín es real, sólo que elegimos preservar su nombre para no revelar su identidad. Y es que el hecho de que el CEO de una importante casa de cambio decida grabarse -para siempre- un dólar en la piel pareciera ser algo extravagante. Sin embargo, según cuenta Rodríguez Oropeza, es más común de lo que el resto de los mortales creemos.

Amanda Rodríguez Oropeza lleva siete años de su vida tatuando. Es de Venezuela pero actualmente reside en la Argentina. En menos de un década, ya tatuó a celebridades como Abel Pintos, Stephanie Demner, Candela Ruggeri, Cande Molfese, Paula Chávez, Oriana Sabatini, Facu Gambandé y Brenda Gandini. La lista sigue. Sólo que, además de extenderse a más personalidades reconocidas del mundo del espectáculo y entretenimiento argentino, en la selecta lista aparecen también algunos CEOs. 

¿Qué tipo de tatuaje buscan los CEOs?

Según Oropeza, la experiencia de tatuar a un CEO varía según su personalidad. “En algunos casos, prefieren tatuajes en áreas que puedan cubrir con ropa, mientras que a otros no les molesta que sus tatuajes queden expuestos”, introduce. “Por lo general, a la mayoría no les preocupa si sus tatuajes son visibles. Quizás porque una camisa manga larga y pantalones cubren muchas posibilidades, especialmente si necesitan lucir más conservadores”, explica.

“Desde mi experiencia, los brazos son una elección común en este segmento. Sin embargo, por poner un ejemplo, en una ocasión, un cliente CEO me pidió un tatuaje en el cuello. Pero solía tener mucha exposición al sol y quería una pieza a color sin muchas líneas. Así que le sugerí otra zona, con menos exposición solar”, recuerda sobre aquel caso.

Amanda Rodríguez Oropeza
Amanda Rodríguez Oropeza.

Por lo general, continúa la tatuadora, “el CEO tiene el impulso de tatuarse por un significado personal o algo estético, como el resto de los clientes”. “En algunas ocasiones, noté que estuvieron evitando hacerse tatuajes, y puede que en algunos casos le tomen el gustito y sigan tatuándose cada vez más y con mayor frecuencia, hasta que ya logran cumplir las ideas pendientes”, revela por su experiencia.

Los tatuajes más solicitados

Respecto a los tatuajes más pedidos por los CEOs, reconoce que las peticiones son muy diversas. “Algunos llegan con ideas relacionadas con su empresa, o quieren plasmar vivencias importantes o rendir homenaje a sus seres queridos. Otros simplemente quieren algo que les apasione o les llame la atención en ese momento”, profundiza.

Tengo un cliente CEO que me pide muchas cosas relacionadas con la playa y el mar. Podría decirse que es un amante de la vida playera. Siempre trae ese tipo de propuestas. Es como si cada tatuaje fuera un pedacito de vacaciones permanentes para él”, prosigue Rodríguez Oropeza.

Y así como la cabeza de una casa de cambios se tatúo un billete de cien dólares, el propietario de un importante restaurante también hizo lo propio: “Se tatuó una botella de vino con el nombre de su hijo. En ocasiones, se tatúan el logo de la empresa”.

Cada vez se perciben menos obstáculos cuando se trata de tener tatuajes, incluso en el ámbito laboral. “Ha habido una transformación significativa en la industria del tatuaje y en la diversidad de su clientela. En la actualidad, la elección de un diseño es mucho más amplia y versátil. Anteriormente, la estética del tatuaje estaba un poco más definida y limitada”, cuenta la especialista.

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El dueño de un restaurante se tatuó una botella de vino con el nombre de su hijo. 

“Gracias al avance tecnológico en máquinas, agujas y pigmentos, hemos alcanzado un nivel de detalle impresionante y se ha abierto un abanico de posibilidades creativas”, precisa. “Yo soy experta en el microrealismo a color, botánica y acuarela. Y soy muy versátil al tatuar. Puedo crear desde líneas finas y minimalistas hasta colores plenos y compactos, así como acuarelas y pinceladas en diseños más libres, logrando un nivel de detalle y realismo. Incluso puedo hacer un tatuaje de una fotografía de tu mascota”, dice. 

Galería con alguno de los tatuajes solicitados por los CEOs

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