El cocinero argentino cuyo restaurante, Mirazur, fue premiado como el mejor restaurante del mundo, es la principal figura del World Chefs Tour, que tiene su primera parada en Madrid.
Mauro Colagreco sabe muy bien lo que es moverse de un lado a otro. Tras formarse en el Instituto Gato Dumas de Buenos Aires y trabajar en los mejores restaurantes de la capital argentina, se trasladó en el año 2000 a Francia y fue poco a poco introduciéndose en las cocinas de los más selectos restaurantes, aprendiendo de reconocidos chefs como Bernard Loiseau en Saulieu o Alain Passard, Alain Ducasse y Guy Martin en París.
Hasta que en 2006 decidió abrir Mirazur, en la francesa localidad de Mentón, donde las fronteras se difuminan con su vecina Italia. “Muchas veces las fronteras no son las que aparecen en los mapas”, explica el chef argentino en una entrevista con Forbes España.
“Si miramos la región donde está enclavado Mirazur, vemos que los Alpes marítimos no se detienen en la frontera; hay muchas similitudes y una continuidad en el paisaje. Italia y Francia son países con una tradición gastronómica enorme, por eso tenemos la suerte de estar en la frontera y de beneficiarnos con todos los productos maravillosos de nuestra región”.
Unas influencias a las que se suman sus orígenes: “En el aspecto cultural y de tradición, Argentina, por la importante inmigración recibida y mi familia en particular por sus orígenes, tiene una impronta italiana innegable. Creo que tengo la suerte de poder aprovechar esas diferencias y similitudes para trascenderlas a partir del acto creativo usando todas las influencias del mundo”.
Quizá esta riqueza multicultural es lo que le ha valido a Colagreco para posicionar a Mirazur como el mejor restaurante del mundo, algo que inmediatamente se tradujo en un aluvión de reservas y unos cuantos meses de lista de espera. “Somos conscientes de la expectativa que genera en las personas la experiencia de comer en el ?Mejor restaurante del mundó, por eso sentimos una gran responsabilidad por hacer de cada visita un momento único e inolvidable”, asegura.
Esa concepción gastronómica, centrada por un lado en el producto local pero aliñada con una visión global, va pareja a la tendencia culinaria de hoy: “Actualmente el público está más abierto a nuevas experiencias gastronómicas y los chefs a intercambiar sus saberes, a conocer otras cocinas. Ha habido una gran evolución en ese sentido. Francia sigue siendo reconocida a nivel mundial como una capital gastronómica de excelencia. Pero hay otras cocinas, otros destinos, que han ganado en visibilidad y que han desarrollado su gastronomía en los últimos años”, añade en la charla con Forbes España.
Buenas causas
Sumarse a iniciativas comoWorld Chefs Tour puede suponer un reto apasionante, pero también trae consigo grandes quebraderos de cabeza, al tener que adaptar una cocina basada en los productos autóctonos a territorios desconocidos. “Cuando nos trasladamos a otros destinos, hacemos un trabajo de investigación para trabajar con los productos que el lugar nos ofrece, conocer a los productores locales y poder crear y reinterpretar esas tradiciones según nuestra filosofía”, afirma Colagreco.
Pero ante todo merece la pena. Primero, por formar parte de una iniciativa gastronómica global, con el dream team de los fogones internacionales, colegas de profesión por los que Colagreco manifiesta una sincera admiración: “Admiro a todos mis pares que sienten pasión por este maravilloso oficio, que son abiertos a compartir y que a través de sus cocinas comunican un fuerte mensaje de amor, de respeto a los productos y a nuestra Madre Tierra”, expresa en este mano a mano con el portal español.
Y, en segundo lugar, porque World Chefs Tour, además de ser una iniciativa cultural, económica y de ocio, también es solidaria: la organización donará un 10% del total de los beneficios netos a las causas seleccionadas por los propios cocineros y a Acción contra el Hambre. Y Colagreco ha optado por apoyar a la Maison des Semences Paysannes Maralpines, que lucha por la gestión colectiva de la diversidad en los cultivos. Otra razón más para sentarnos a su mesa.
En qué consiste la gira World Chefs Tour
Se trata de una gira mundial donde los mejores chefs del mundo llegarán a Madrid en 2020. Durante nueve meses, y con una duración de una semana, nueve de los chefs más importantes del planeta tierra trasladarán sus cocinas y equipos a la capital de España. Tal como informó Esquire, se ofrecerá una propuesta gastronómica especial en un restaurante pop up dentro del hotel Villa Magna.
Además, hay distintas opciones de reserva: desde una mesa de temporada para disfrutar de los nueve chefs a partir de 7.000 euros por persona, hasta mesas para cada uno de los cocineros con precios que arrancan desde los 750 euros y se estiran a los 990 euros por personas y experiencia, variando según cada chef y restaurante.
Desde el 28 de enero al 2 de febrero será el turno del argentino, quien además tendrá el honor de ser el cocinero que abra este prestigioso evento.