A pesar de que nos encontramos en una etapa de “nueva normalidad”, hay hábitos heredados de la pandemia del Covid-19 que todavía persisten. Según un estudio reciente, casi la mitad de los argentinos ha decidido no compartir más el mate, junto con mantener costumbres que se establecieron en los meses de aislamiento obligatorio. Este dato fue resultado de una encuesta que indaga sobre estos temas entre los argentinos en el último año desarrollada por Readiness, consultora nacida durante la pandemia y que ayuda a la transformación cultural de las empresas apoyándose en la tecnología.
Además del dato sobre no compartir el mate, marcado por el 40% de los encuestados. El estudio arrojó los siguientes resultados. Un 56% reconoció continuar con el uso del barbijo en espacios cerrados (transporte público, comercios, escuelas, oficinas), Un 53 % sigue usando alcohol en gel, mientras que un 38% decide continuar saludando personas chocando puños en lugar del beso y un 8% continua evitando los abrazos.
Los hábitos de mantener cuidados al extremo y evitar mayores aglomeraciones de personas también fueron registrados por la encuesta. Un 25% reconoció no compartir vasos o botellas de agua, mientras que un 22% continúa manteniendo la distancia social, así como también un 14% decide asistir a reuniones menos numerosas. Por el contrario de esta tendencia, solo un 5% reconoció haber abandonado todo tipo de hábito de cuidado adoptado en la pandemia.
En lo que respecta más a hábitos que se conservan de la época del aislamiento y de las primeras etapas de la “nueva normalidad”, el estudio arroja que un 46% de los encuestados continúa haciendo compras online, un 30% está más atento a la higiene y cuidado personal, un 28% adoptó como hobby “maratonear” series, un 26% continúa haciendo cursos y capacitaciones online, un 25% decidió tener una alimentación más sana, mientras que un 20% decidió cambiar sus prioridades de vida.
“La pandemia nos exigió hacer cambios drásticos en nuestra vida, de un día para otro. Al principio muchos se resistieron pero creo que en la gran mayoría terminamos entendiendo que ese tipo de modificaciones a nuestra cotidianeidad eran necesarias para seguir adelante. Quizás por eso ahora es difícil volver a como estábamos antes. Ahora nos encontramos en un proceso de adaptación a lo que éramos y a lo que somos”, analizó Juan Galo Martínez Nigro, CEO de Readiness Global.
“Este mismo proceso implica un aprendizaje, el cual se va dando con reglas que estamos reescribiendo, principalmente porque es un contexto nuevo e inédito para cualquier persona. Desde ya que esto es un desafío muy importante para un individuo y también para las empresas, que deben empatizar con este tipo de aspectos para ofrecer un espacio donde su personal se sienta cómodo y pueda dar lo mejor de sí. No salimos mejores ni peores de la pandemia, como se decía, salimos distintos y nos va llevar tiempo analizarlo”, concluyó Martínez Nigro.
La encuesta por muestreo fue realizada en forma online durante el mes de mayo de 2022 entre 400 personas de 25 a 60 años, de NSE amplio residentes en Argentina.