Si bien Verónica Marcelo trabaja desde hace 16 años en Natura, asumió como gerente general de la operación en la Argentina el 1° de abril de 2020. O sea, poco tiempo después de iniciada la pandemia y en un momento bisagra para el mundo. “Construí mi liderazgo en Natura. Es una empresa cuyo ADN tiene como base las relaciones y la sustentabilidad como grandes valores. Si tengo que pensar cómo desarrollé mi liderazgo y qué pasó en ese momento de pandemia, me agarré de esos valores: las personas y que las decisiones del corto plazo iban a impactar en el largo”, dice sobre la experiencia que implica responsabilidad por sobre más de 230.000 consultores independientes en el país. 

¿Cómo trabajaron para que la economía de esas personas no se frenara?

El modelo de negocio está basado en las relaciones, en las personas. Eso no va a cambiar. La pandemia aceleró todos los procesos de transformación y nos dio una mano. El principal vehículo del negocio es la revista digital, el catálogo, ir a visitar a la gente. Entonces utilizamos la digitalización a nuestro favor y ese catálogo físico pasó a ser digital interactivo. Eso implicó una serie de desafíos, principalmente en capacitación. Llevamos un año y medio con esta metodología, mantuvimos esa economía circulando, y los desafíos continúan. Se trata de mirar hacia el futuro y no quedarnos atados a modelos que tal vez quedaron en el pasado. Y en paralelo desarrollamos un canal de venta online, con la consultora en el centro.

¿Qué rol juegan la diversidad y la inclusión dentro de esta estrategia?

Diversidad es un tema que tenemos que poner en agenda. Tenemos la responsabilidad como empresas de impulsar esta agenda en un rol activo. Las empresas que no piensen desde un punto de vista del triple impacto van a ser cada vez menos rentables. Y, después, plasmarlo en acciones. Primero, tener una cultura realmente diversa donde cada persona pueda ser quien sea sin prejuicios, sin estereotipos y se sienta en un ambiente seguro. Y hablar de diversidad en su nivel más amplio, cultural y de inclusión de las minorías.

Con prueba y error?

Sí, como el debate de los cupos, hoy necesitamos ponernos metas. Ojalá que sea natural y no tengamos que utilizarla. Diversidad es un tema crítico: más ideas, más innovación. ¿Por qué mantener el statu quo? Nos tenemos que desafiar.

¿Cómo trabajan desde Natura para empoderar a las mujeres?

Tenemos tres ejes. Primero la capacitación, que da autonomía, fortaleza y autoestima. Por otro lado, dar visibilidad a los logros de las mujeres. Y tercero, crear una red de contención. De los 780 colaboradores de Natura Argentina, el 80% son mujeres y el 51% ocupa posiciones de liderazgo.

¿Cómo ves al consumidor hoy?

Totalmente empoderado. Mucho más consciente, mucho más informado, exige saber qué hay detrás de cada producto, investiga. Nos genera muchísimos desafíos y lo tenemos que escuchar, porque nos hace evolucionar.