LinkedIn superó recientemente los 1.000 millones de miembros, con más de 49 millones de usuarios que lo visitan cada semana. El sitio evolucionó en los 20 años transcurridos desde su creación e, irónicamente, la transición hacia un enfoque centrado en el feed de noticias permitió que se difunda desinformación sobre LinkedIn, en la misma plataforma.
Uso el sitio profesionalmente desde su lanzamiento, y durante más de una década gestioné el "acuerdo empresarial" (el término de LinkedIn para su conjunto de herramientas insignia) en las empresas de Fortune 500 en las que trabajé.
También tuve el privilegio de hablar en eventos de LinkedIn en todo el mundo, e incluso en su evento cumbre "Talent Connect", la cumbre mundial anual. Por eso, mi objetivo es ofrecer una visión privilegiada de cómo funciona realmente la plataforma:
1° mito: el cartel Open to work obstaculiza tu búsqueda de trabajo
Esperaba que ya no exista este discurso en 2023, pero por desgracia el mito persiste. El equipo de producto de LinkedIn creó esta función en respuesta a la primera oleada de despidos pandémicos, y se diseñó con el propósito expreso de eliminar fricciones en el proceso de búsqueda de empleo.
La función tiene dos opciones diferentes que te permiten indicar que estás abierto a oportunidades, y ambas dan resultados extremadamente positivos. La primera opción te permite notificar a los reclutadores únicamente que estás en busca de un nuevo empleo. La segunda opción es el banner verde que aparece en tu perfil, visible para todos los usuarios.
Dependiendo de dónde te encontrás en tu búsqueda de trabajo, puede que quieras activar una o ambas características. La primera opción suele aumentar en un 40% el contacto con los reclutadores. La segunda característica suele dar lugar a un aumento del 20% en los mensajes de toda la comunidad de LinkedIn.
La activación de estas opciones resulta en más mensajes privados por dos razones diferentes: para los reclutadores, el algoritmo les indica que es más probable que respondas. Para el resto de usuarios, el "banner verde" es una fuerte señal visual que impulsa sistemáticamente a las personas a esforzarse por hacer conexiones, como demuestran los datos agregados de todo el ecosistema de LinkedIn.
Como reclutador, no puedo imaginarme ningún universo en el que no se utilicen estas opciones.
2° mito: no vale la pena presentarse a ofertas con cientos de candidatos
A pesar de todos los rumores en sentido contrario, no deberías desanimarte de presentarte cuando veas una oferta de empleo con más de 500 solicitantes. La cifra que ves es simplemente un recuento del número de personas que apretaron "solicitar", lo que no muestra la historia completa.
La diferencia entre el número de personas que pulsan el botón "solicitar" y el número real de solicitudes completadas dentro del sistema puede ser enorme:
Para cuantificarlo, en una de las empresas (Fortune 500) en las que trabajé, la caída de los medios externos en el sistema de seguimiento de candidatos (ATS) fue de un asombroso 99%. Dicho de otro modo, por cada 100 personas que pulsaban "solicitar", sólo recibíamos una solicitud completa dentro del ATS.
El recorrido de la solicitud era tan engorroso que la gran mayoría de las personas simplemente desistían. Aunque se trata de un ejemplo extremo, es seguro asumir al menos un 80% de diferencia en la mayoría de los escenarios, por lo que tu cv puede ser competitivo.
La otra gran verdad de las matemáticas detrás de LinkedIn es el enorme volumen de solicitantes no cualificados: durante mis 20 años de experiencia, en cada parte de la empresa, en cada geografía, la relación señal-ruido fue sistemáticamente 25% de señal, 75% de ruido.
Por cada cien solicitudes completas que recibimos, por término medio sólo veinticinco personas cumplirán los requisitos mínimos para el puesto. Los reclutadores dedican una parte importante de su tiempo a rechazar candidatos que nunca deberían haber presentado su solicitud en primer lugar.
Todo esto para decir que tu competitividad no es tan grande como pensás. Presentá tu candidatura si cumplís (o superás) los requisitos mínimos para el puesto.
3° mito: sólo hay una versión de LinkedIn
La gran mayoría de los mil millones de miembros de LinkedIn sólo ven la aplicación y el sitio web de cara al público, pero detrás de esos escenarios digitales hay una serie de productos profesionales. La gente de ventas, por un precio, puede acceder a una herramienta llamada Sales Navigator que les ayuda a averiguar quiénes presentan las mejores perspectivas de talento para sus organizaciones.
Para los reclutadores profesionales existe un producto (también una aplicación) llamado LinkedIn Recruiter: en promedio, dedicamos más tiempo a buscar candidatos que a evaluar las solicitudes recibidas. Es como pescar con arpón o con red de arrastre. Tanto si sos un reclutador de agencia, como si formás parte de un equipo de recursos humanos interno, la herramienta puede ser una gran ayuda.
La versión profesional de LinkedIn nos permite ver a todos y cada uno de los miembros del planeta. Cuando buscamos en la plataforma podemos ver nuestras conexiones de primer, segundo y tercer grado. Pero con Linkedin Recruiter podemos ver a todos. Los mil millones enteros.
Una de las cosas más impactantes que podés hacer por vos mismo, ya sea en el contexto de una búsqueda de empleo o de la construcción de una carrera a largo plazo, es optimizar al máximo tu presencia y perfil en LinkedIn.
Completá por completo tu perfil, actualizá tus habilidades y ampliá tu huella digital interactuando con publicaciones de empresas y profesionales que admires.
Cuanto más completa sea tu presencia digital, más identificable será para los reclutadores. Más que nunca en este mercado laboral post-pandémico, la forma más fácil de encontrar trabajo es que un reclutador te encuentre.