Tener un jefe desorganizado puede ser muy molesto. Algunos jefes se olvidan de las reuniones o nunca llegan a tiempo. Otros tienen dificultades para completar proyectos. Otros se olvidan de enviar materiales necesarios para cumplir con los entregables. Solo tuve un jefe desorganizado antes. Completar tareas se sentía como un juego de adivinanzas. Hacer proyectos era una pesadilla absoluta. Planificar eventos era agotador. Aunque no me gustaba trabajar para un jefe desorganizado, me ayudó de muchas maneras. Fue una experiencia de aprendizaje que nunca olvidaré. Me mostró lo que no estoy buscando en un jefe.
A veces la gente olvida buscar señales de alerta durante las entrevistas de trabajo porque realmente necesitan trabajar. Una señal de alerta importante durante una entrevista es que un posible empleador admita que es desorganizado o muestre signos evidentes de ser desorganizado. Si reprograman una entrevista varias veces, llegan tarde cuando se encuentran con vos, o no pueden recordar puntos importantes de la conversación, probablemente estés tratando con un gerente desorganizado. Está bien si ya pasaste la etapa de contratación y aceptaste un trabajo con un liderazgo caótico. Hay varias acciones que podés tomar para ayudar a tu jefe a ser más organizado. Aquí van tres cosas que deberías hacer si tu jefe es desorganizado.
Tener paciencia
Es casi imposible trabajar con un jefe desorganizado sin tener paciencia. Si te identificás con este artículo, probablemente notes que tu jefe rara vez llega a tiempo. Incluso podrían olvidar de qué están hablando o qué te pidieron que hagas. En lugar de enojarte con ellos por ser desorganizados, adoptá en cambio un enfoque paciente y empático. Algunos profesionales no son organizados como resultado de un trauma. Algunos estuvieron rodeados de caos completo cuando eran niños, y a veces, una desorganización tan grave que afecta la forma en que se comportan. Nunca les enseñaron cómo organizarse en sus vidas personales o en sus carreras.
Escribir esto me recuerda cómo una vez un mentor me dijo que cada persona lleva su trauma a una conversación. Eso realmente se quedó conmigo, nunca sabés por lo que alguien está pasando. Ese jefe desorganizado que no soportas puede estar lidiando con algo serio. Podría ser un divorcio, una muerte, un aniversario difícil, problemas de salud mental, el estrés de cuidar a alguien, o algo más. También es importante tener en cuenta la neurodivergencia. Tu jefe puede tener dificultades para mantenerse organizado debido al TDAH u otro trastorno del neurodesarrollo. Muchas personas con TDAH luchan con la gestión del tiempo y las habilidades organizativas. No importa lo difícil que se vuelva el trabajo, no hables con tus colegas sobre la desorganización de tu jefe. Habla con un mentor o un profesional de la salud mental sobre cómo puedes ser más paciente con tu jefe.
Hacer preguntas
En lugar de decir que el enfoque de tu jefe es un desastre, pregunta si considerarían completar una tarea de una manera diferente. Asegurate de presentar la mayoría de tus sugerencias como preguntas para que tu jefe no sienta que le estás diciendo qué hacer. Cuando tu jefe hable en una reunión o introduzca un nuevo proyecto, hacé preguntas relevantes que los guíen hacia una toma de decisiones más organizada. Si hay preguntas que dudás en hacer, reservalas para una reunión a solas con tu jefe. Nunca querrías avergonzar al liderazgo haciendo una pregunta que revele que son desorganizados.
Los gerentes quieren empleados que les faciliten la vida y, al mismo tiempo, los hagan lucir bien. Si hacés demasiadas preguntas, podés parecer irritante o difícil. No querrás ser despedido por desafiar demasiado a tu jefe. Piensa muy bien en las preguntas que tienes antes de formularlas. Considera seriamente si hay alguna forma en que tu pregunta pueda ofender o avergonzar a tu jefe. Si eres nuevo en un trabajo, aprende el estilo de liderazgo de tu jefe antes de hacer muchas preguntas. Si tu pregunta conducirá a un resultado más organizado, entonces sin duda hazla. Cuanto más conozcas a tu jefe, más podrás practicar la transparencia profesional, y esto incluye hacer preguntas importantes. Durante las reuniones siempre debes tomar notas y anotar cualquier pregunta que puedas tener para tu jefe.
Tomar notas
Si tienes un jefe desorganizado, es hora de empezar a escribirlo todo. Tomar notas durante las reuniones es una forma de asegurar que tu jefe esté más organizado. Ten las notas de las reuniones listas para una reunión a solas con tu jefe. Pregunta si les gustaría ser agregados a documentos donde tomás notas durante reuniones y llamadas. Además, crea un documento compartido con tu jefe que tenga una lista de entregables por completar, logros que has experimentado y cualquier obstáculo que enfrentes. Después de que tu jefe te pida hacer algo, ponlo en tu documento compartido bajo la sección dedicada a los entregables. De esa manera, tu jefe puede hacer un seguimiento de en qué estás trabajando y qué has completado.
Asegurate de enviar el enlace a tu documento compartido directamente a tu jefe por correo electrónico o Slack. Si tu jefe es desorganizado, es mejor enviarle el enlace directamente para que pueda abrirlo de inmediato y no olvidarlo. Tomar notas en un documento compartido te ayudará durante las reuniones con clientes y socios. Es especialmente importante escribir las cosas durante las reuniones a solas con tu jefe. Podrían olvidar lo que dijeron durante una reunión o lo que te pidieron completar. Escribir las cosas puede ayudar a evitar conflictos y mantener las cosas organizadas. Siempre que tengo un trabajo, ya sea a tiempo parcial o completo, tomo notas en cada llamada telefónica y en cada reunión. Para aquellos que trabajan bajo un liderazgo caótico, escribir las cosas hace la vida mucho más fácil. Al igual que hacer preguntas y tener paciencia. Ahora sabes cómo lidiar con un jefe desorganizado. Sigue estas sugerencias y no solo trabajarás, sino que prosperarás.