El tema de las generaciones no es menor, es importante para hacernos tomar conciencia de que, si no hay diálogo intergeneracional, no solo pierden las personas de mi generación, sino también las más jóvenes, asegura Mercedes Jones, directora de proyectos del Centro de Innovación Social de la Universidad de San Andrés (Udesa).
Jones aclara que ella representa a una generación que está prácticamente subrepresentada en todos los ámbitos y en todos los diálogos del país. Por eso me preguntaba por qué estamos hablando ahora de generaciones, y la respuesta corta es porque las edades se hicieron líquidas y ya no nos sirven. ¿Qué significa esto?
Para definir algunas cosas, para tomar decisiones informadas y para planificar futuros tenemos que empezar a pensar en los grupos de edades, porque hay una transversalidad y un corrimiento de lo que nosotros antes llamábamos vejez, y ahora empezamos a aprender a llamar longevidad. Estamos viviendo mucho más como humanidad, y mucho no sabemos qué hacer con esto, añade Jones.
La socióloga destaca que las compañías son las instituciones que hoy están más alertas en cuanto a la longevidad, y que esto se da sobre todo porque tienen una perspectiva más global. Lo que aprendí tiene mucho que ver con en qué lugar nos estamos poniendo las mujeres, qué es lo que estamos percibiendo, y el avance es que aprendimos la importancia de la intersección. Por ejemplo, una intersección es la edad, pero no es la única. Me acuerdo de una mujer que integraba la Asociación Indígena de la República Argentina que me decía: 'Yo fui excluida como mujer, como indígena, como pobre y ahora como vieja', concluye Jones, afirmando que el foco para salir de esto está en generar redes.