Algunos se imaginan al Directorio como un grupo de señores mayores que conversan acerca de generalidades y toman café en una cómoda sala de reuniones. Otros creen que el Directorio es una entidad meramente formal que no tiene ni necesita ningún tipo de funcionamiento más allá de producir las actas de reunión requeridas por la normativa. Muchos piensan que la labor de gobierno del Directorio es un intangible cuya aportación al éxito de la empresa es difícil de cuantificar. Nada hay más alejado del rol y del potencial del Directorio que estas concepciones. Cuando hay un buen Directorio al frente de una empresa su creación de valor es real y puede percibirse claramente.
Qué es un buen directorio
Al hablar de buen Directorio se hace referencia al que pone en práctica el arte de gobernar siguiendo los principios y prácticas adecuadas de gobierno corporativo. El Directorio de las empresas es el responsable de concretar los objetivos propios del gobierno de una organización: crear contexto y proveer futuro. El Directorio desempeña un papel esencial en la generación de la confianza necesaria para crear un contexto adecuado que permita a la empresa desarrollar correctamente sus operaciones. No sólo debe tutelar los intereses de los Accionistas, sino que debe también considerar a todos los grupos de interés enfocándose en trabajar para la continuidad de la organización como forma primordial de proveer futuro y, consecuentemente, de agregar valor.
Puede pensarse que la necesidad de un buen gobierno corporativo es propia sólo de las grandes empresas, particularmente de las de capital abierto. Pero es importante señalar el trascendente rol que juega el buen gobierno corporativo en todas las organizaciones, cualquiera sea su tamaño y complejidad. La distinción entre la propiedad, la dirección y la gestión, así como también el ordenamiento del sistema de decisiones y los procesos a través de los cuales los Accionistas, el Directorio y los ejecutivos se interrelacionan y coordinan en busca de ese objetivo común que los vincula, son elementos esenciales y absolutamente necesarios -aunque no suficientes-, para la continuidad y perdurabilidad de la organización. El Directorio es la pieza que articula todo el sistema de gobierno de las empresas.
Cuál es el valor de un Directorio
Si queremos profundizar en el valor aportado por un Directorio hay que comenzar por identificar su posicionamiento y rol dentro del sistema de gobierno de una empresa, es decir, tener un claro y preciso entendimiento de lo que se espera de él como órgano de gobierno. Luego, continuar con el conocimiento profundo de cuáles son sus funciones insoslayables y los procesos que deben estar vigentes para un desempeño efectivo de su rol. Y finalmente, culminar con su puesta en práctica por un equipo de Directores competentes. Algo tan sencillo y fácil de explicar, como difícil de implementar, al mismo tiempo que esencial y crucial para el futuro de toda empresa.
Esta es la idea principal que impulsa a los autores de Directorios creando valor. Su amplia experiencia con Directorios de todo tipo les ha llevado a la conclusión de que, por lo general, se pueden lograr mejoras considerables y rápidas en el funcionamiento de los Directorios con sólo implementar algunas de las prácticas mencionadas en este libro. Directorios creando valor explora los fundamentos, las funciones, la estructura, los procesos, y el desarrollo y evolución del Directorio en el tiempo. Ofrece indicaciones y herramientas cuya utilidad y eficiencia ha sido comprobada en muchas y diversas empresas en todo el mundo.
Este libro está dirigido fundamentalmente a todo empresario o directivo que quiera genuinamente, a partir de procurar un buen gobierno, trabajar con la mira puesta en la continuidad de la empresa. Esta obra busca convertirse en libro de consulta en todo lo referente a cómo crear valor desde un Directorio. También pretende servir de orientación a los Accionistas, que deben nombrar Directorios efectivos. Finalmente, también intenta animar a quienes son o quieren ser Directores para desarrollarse adecuadamente y alcanzar la idoneidad que este rol tan importante requiere.
*Por Pedro Vázquez y Alejandro Carrera, ambos profesores del IAE Business School, Universidad Austral, al frente de la Cátedra PwC de Gobierno Corporativo.