La plantilla de Desigual aprobó en octubre reducir su jornada laboral a cuatro días semanales, tras aceptar la propuesta de la empresa con un 86% de los votos, por encima del 66% que se requería para adoptar la medida.
Según apuntó la compañía, la nueva jornada laboral será de lunes a jueves, con opción a un día de teletrabajo, y a cambio de reducir un 6,5% sus salarios -frente a la rebaja del 13% de las horas de trabajo.
El director general de Desigual, Alberto Ojinaga, mostró su satisfacción ante el resultado de la votación, asegurando que están convencidos de que "contribuirá a mejorar la conciliación entre la vida personal y profesional" de los trabajadores. Asimismo, confía en que esta iniciativa haga a la empresa "más atractiva" para poder atraer y retener talento.
¿Ha superado la sociedad la semana laboral de 40 horas?
Un estudio realizado por el equipo de SimpleTexting dice que sí. En esa encuesta, realizada a más de 1.000 estadounidenses, nueve de cada diez personas creen que la semana laboral de cinco días es anticuada. No solo eso, sino que casi el 80% de los encuestados afirma que la pandemia ha aumentado su deseo de una semana laboral de cuatro días. Y un abrumador 98% cree que mejoraría su salud mental.
Por ello, algunas empresas están probando el concepto. En junio, la plataforma de financiación colectiva Kickstarter anunció una semana laboral piloto de cuatro días a partir de 2022. "Kickstarter tiene un historial de enfoque reflexivo sobre la forma en que diseñamos nuestro lugar de trabajo. A medida que construimos un futuro que es flexible, vemos la prueba de una semana laboral de cuatro días como una continuación de ese espíritu e intención", dijo el CEO de Kickstarter, Aziz Hasan.
Otras empresas como Unilever y Shake Shack también están experimentando con la idea. A medida que nos adentramos en un mundo pospandémico, he aquí algunas razones de peso por las que las empresas deberían considerar una semana laboral de cuatro días.
Reduce los gastos generales y otros costos
Desde el punto de vista financiero, los estudios indican que pasar a una semana laboral de cuatro días puede reducir los gastos generales y otros costos. Las empresas eliminan inmediatamente un porcentaje de los gastos generales variables, como el consumo de electricidad y energía. Por ejemplo, en el ensayo de Microsoft Japón, los costos de electricidad se redujeron un 23%.
Además, los empleados utilizan menos material de oficina y equipos como impresoras y fotocopiadoras se deprecian más lentamente. Menos días de trabajo significan también menos servicios de limpieza. Y si se tienen en cuenta las ventajas diarias que muchas empresas ofrecen a sus empleados, como aperitivos o almuerzos gratuitos, el ahorro de costes aumenta aún más.
Ayuda a atraer y retener el talento
Esta propuesta de nueva forma de trabajo puede ayudar a resolver uno de los principales problemas a los que se enfrentan los empresarios: la rotación de personal. Sobre todo porque tres de cada cuatro encuestados por SimpleTexting declararon que considerarían dejar su trabajo actual si se les ofreciera un puesto para trabajar una semana laboral de cuatro días. Además, un reciente informe de Gallup estimó que la rotación de los millennials cuesta a la economía estadounidense US$ 30.500 millones al año.
Según ese mismo informe, los millennials sitúan el equilibrio entre el trabajo y la vida privada en lo más alto de su lista de prioridades a la hora de considerar las opciones de empleo. Por ello, un horario que permita un día adicional no laborable a la semana puede resultar atractivo para los trabajadores. Y los resultados de la Universidad de Reading apoyan esta teoría. En ese informe, alrededor del 63% de los empresarios del Reino Unido afirmaron que una semana laboral de cuatro días ayudaba a atraer y retener el talento.
Aumenta la productividad y el bienestar de los empleados
En 2019, Microsoft Japón probó la reducción de la semana laboral en un día, lo que llevó a un aumento del 40% en la productividad. No solo eso, sino que Andrew Barnes, fundador de la empresa neozelandesa Perpetual Garden, probó el mismo experimento. Al final, sus empleados estaban más contentos y eran más productivos. Eso se debe a que trabajan de forma más inteligente, no más dura. Investigadores de Islandia también han descubierto que una semana laboral de cuatro días sin reducción de sueldo mejoraba el bienestar y la productividad de los trabajadores. Durante cuatro años, los investigadores hicieron un seguimiento de 2.500 empleados que redujeron su semana laboral a 35 o 36 horas. Descubrieron que "el bienestar de los trabajadores aumentó drásticamente en toda una serie de indicadores, desde el estrés percibido y el agotamiento hasta la salud y el equilibrio entre el trabajo y la vida privada". Al mismo tiempo, la productividad de los empleados se mantuvo o mejoró.
Aunque la semana laboral de cinco días y 40 horas es una tradición casi centenaria, el modelo está muy desfasado. Los empleados deben ser medidos por su rendimiento, no por sus horas. ¿Se convertirá la semana laboral de cuatro días en el futuro del trabajo? Solo cuando las empresas se den cuenta por fin de que puede beneficiar tanto a los empleados como a la cuenta de resultados. Un verdadero beneficio para todos.