Dolores Egusquiza cofundó Klimber, una insurtech que opera en múltiples países de América Latina, y actualmente lidera un equipo de 80 profesionales. Empecé el camino en la compañía hace cinco años, generando seguros digitales de vida, y fuimos recorriendo un camino donde ahora estamos trabajando en cuatro países (Argentina, Brasil, México y Chile)", describe la emprendedora.
"Lo que hacemos es desarrollar la tecnología para que grandes ecosistemas como Mercado Pago puedan ofrecer seguros a sus usuarios, agrega.
En un contexto donde las mujeres aún son minoría en la industria tecnológica, Egusquiza destaca la importancia de promover modelos de trabajo flexibles que empoderen a las mujeres. Su experiencia demuestra que el éxito en este ámbito no está limitado por el género, sino que depende del talento, la determinación y la habilidad para desafiar las normas establecidas.
Tenemos que romper la idea de la foto de tres varones con remera negra de una start up, enfatiza. Además, recuerda que son pocas las mujeres emprendedoras y, en ese contexto, lo que más orgullo le da es generar trabajo: Hoy somos 80 personas y toda esta responsabilidad nos hace sentir un vértigo que nos hace preguntar qué va a pasar en el futuro entre el contexto del país y la necesidad de crecimiento.
Como emprendimiento que se piensa internacional, Egusquiza señala que desde el minuto cero tuvieron como objetivo el desarrollo regional. Siempre supimos que la estabilidad y el crecimiento debía venir por negocios que se gestaran fuera de Argentina. Y añade: Yo siento que no inspiro a nadie, porque me pregunto cómo puedo inspirar a alguien si todos los días sigo aprendiendo. Pero somos agentes de cambios y tenemos que hacernos cargo de eso, concluye la emprendedora.