La influencia que tiene la actividad ganadera en la emisión de los gases de efecto invernadero es una de las banderas que esgrimen los diversos movimientos y asociaciones que apoyan el veganismo en el mundo. Sin embargo, un estudio reciente elaborado por el CONICET sugiere que la carne argentina es una carne sustentable.
Presentado por el investigador Ernesto Viglizzo en el marco de un seminario sobre ganadería sustentable organizado por el Instituto de promoción de la carne vacuna IPCVA, el estudio fundamenta que la ganadería vacuna argentina emite apenas el 0,1% de los gases de efecto invernadero a nivel mundial.
El especialista explicó que del total de los gases de efecto invernadero emitidos en el mundo, menos del 0,6% corresponden a la Argentina. De ese total, el 0,22% los emite el sector rural y, de ahí, el 0,12 lo emite el sector ganadero, mientras que el vacuno sólo aporta el 0,10%, detalló.
"El impacto que puede tener la ganadería vacuna en las emisiones globales no llega al 0,1%, es una cifra totalmente insignificante", indicó. En medio de este escenario, el investigador del Conicet advirtió sobre "amenazas visibles al negocio ganadero bovino".
También lamentó la "creciente influencia global de entidades ambientalistas y veganas que persistentemente acusan a la ganadería bovina de utilizar un exceso de tierra y de agua, contaminar recursos naturales, emitir grandes volúmenes de gases de efecto invernadero y afectar la salud humana con enfermedades cardiovasculares".
"La ganadería es parte de la solución"
En el marco del seminario 'Carne Argentina, Carne Sustentable', organizado por el Instituto de Promoción de la Carne Vacuna Argentina (IPCVA), se indicó que la ganadería "no es parte del problema sino parte de la solución".
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En la apertura, Juan José Grigera Naon, presidente del IPCVA, remarcó la importancia de la sustentabilidad para la producción ganadera. "Para el productor, la ganadería es un estilo de vida, no es solamente un negocio. Por eso, la sustentabilidad para el productor es ambiental, es decir preservar el ambiente en donde se encuentra trabajando", dijo el directivo.
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Del total de los gases de efecto invernadero emitidos en el mundo, menos del 0,6% corresponden a la Argentina.
Destacó que la ganadería también "captura carbono por parte de estos sistemas que son fundamentalmente pastoriles y silo pastoriles". Del estudio surge que "la ganadería argentina contribuye sólo en un 0,15% a los gases de efecto invernadero de todo el mundo. Mientras que sólo dos países son responsables del 50%, miren la diferencia".
Por su parte, el especialista en ganadería Aníbal Pordomingo, del EEA INTA Anguil (La Pampa), mencionó las claves de la sustentabilidad de los sistemas ganaderos argentinos que, según su visión, son "integrados e insumo-eficientes".
Evaluó que la ganadería argentina "puede ser súper eficiente, que tiene esas habilidades para adaptarse a los mercados y los sistemas, y que puede ofrecer servicios sin tener que olvidarse de la integralidad". También habló el director técnico de asistencia tecnológica del INTI, Javier Echazarreta, sobre la huella de agua e hídrica en carne bovina argentina.
En el cierre, Mario Ravettino, vicepresidente del IPCVA y presidente del consorcio exportador ABC, detalló que "el tema de la sustentabilidad en el mundo actual ha cobrado una significativa importancia de la cual Argentina no puede quedar al margen".
