El acuerdo tardó meses en finalizar, pero Elon Musk finalmente se hizo cargo de Twitter, convirtiéndola en una empresa privada y nombrándose a sí mismo como su director ejecutivo. Después de unos meses al frente, planea renunciar.
Hagamos un vistazo más de cerca de qué le depara el futuro a Twitter.
La historia de la adquisición de Twitter
Elon Musk comenzó su apuesta por el control de Twitter a principios de este año. El proceso se inició cuando compró el 9,2% de las acciones de la empresa, lo que lo convirtió en el mayor accionista de la empresa. Después de hacer su oferta para comprar la compañía por alrededor de US$ 44 mil millones, el trato fue de ida y vuelta por un tiempo.
Por momentos, parecía que se estancaba. Finalmente, Musk y Twitter finalizaron la adquisición a 54,20 dólares por acción. Sin embargo, ese no es el final de la historia. Una vez que Musk se convirtió en propietario de Twitter, comenzó a implementar grandes cambios.
Los altos ejecutivos de Twitter fueron despedidos a los pocos días. También despidió a aproximadamente la mitad del personal de la empresa y comenzó a cambiar las políticas de moderación de contenido.
¿Qué está pasando ahora?
Parece que Musk está listo para renunciar como director ejecutivo de Twitter. En una audiencia judicial en noviembre, Musk testificó en un caso presentado en su contra por un accionista de Tesla que su papel como director ejecutivo de Twitter era temporal.
Específicamente, afirmó: “Espero reducir mi tiempo en Twitter y encontrar a alguien más para administrar Twitter con el tiempo”.
Unas semanas después, Elon Musk creó una encuesta en su cuenta de Twitter. Preguntó a los usuarios de Twitter: “¿Debería renunciar como jefe de Twitter? Cumpliré con los resultados de esta encuesta”. El conteo final de la encuesta indicó que el 57,5% de los usuarios querían que Musk se fuera de la silla grande.
Después de que se finalizaron los resultados de la encuesta, Musk tuiteó: “¡Renunciaré como director ejecutivo tan pronto como encuentre a alguien lo suficientemente tonto como para aceptar el trabajo! Después de eso, solo dirigiré los equipos de software y servidores”.
Aunque los resultados de la encuesta pueden ser una de las razones por las que Musk renuncia, es probable que otros factores estén en juego. Por un lado, las acciones de Tesla han estado cayendo significativamente desde que Elon Musk asumió el cargo de director ejecutivo de Twitter. Dado que la prioridad de Musk siempre ha sido Tesla y las empresas estrechamente relacionadas, es posible que renuncie para restablecer sus compromisos de tiempo.
¿Quién será el nuevo CEO de Twitter?
Oficialmente, la búsqueda de un nuevo CEO de Twitter comenzó hace unos días. Si bien Musk podría tener algunos contendientes en mente, no hay pistas confiables sobre quién es el próximo en la fila para el asiento caliente de Twitter.
Los medios de comunicación se han centrado en unos pocos candidatos. Por ejemplo, CNN señaló a Sheryl Sandberg, ex directora de operaciones de Facebook, o Mike Schroepfer, ex director de tecnología de Facebook. Muchos otros usuarios de Twitter han dado un paso al frente para poner su sombrero en el cuadrilátero. Algunos incluyen al investigador de inteligencia artificial Lex Fridman y al rapero Snoop Dogg.
Los candidatos más probables son las personas que han estado ayudando a Musk a administrar Twitter desde la adquisición. Algunos candidatos potenciales incluyen a Jason Calacanis, empresario e inversor; David Sacks, otro inversionista; y Sriram Krishnan, socio de Andreessen Horowitz y exjefe de equipo de Microsoft, Twitter, Yahoo!, Facebook y Snap.
De momento, solo Elon Musk sabe qué rumbo piensa tomar la compañía con respecto a este nuevo nombramiento.
¿Quién estará a cargo de Twitter?
Elon Musk ha prometido nombrar un nuevo CEO para Twitter. Cuando esto suceda, las operaciones diarias se transferirán a otra persona. Sin embargo, Musk seguirá siendo el dueño de la empresa. Con eso, el CEO de Twitter informará a Musk.
En última instancia, la dinámica de poder aún dejará a Musk a cargo del futuro de Twitter. Dicho esto, tendrá más tiempo para dedicarse a sus otras empresas, como Tesla y SpaceX.
Impactos de los inversores
La saga de Twitter fue una gran historia durante el último año. Esto es especialmente cierto si Twitter es su plataforma de redes sociales preferida. Pero, como inversionista, no tiene la oportunidad de comprar acciones de Twitter.
Cuando Musk compró Twitter, hizo que la empresa fuera privada y pagó un precio por acción de 54,20 dólares a los accionistas. Como resultado, los inversores que quieran agregar empresas de redes sociales a sus carteras tendrán que buscar otras opciones.
Además, si desea agregar acciones de redes sociales a su cartera, monitorear los titulares y los mercados que rodean estas plataformas gigantes es una parte clave del proceso.
La adquisición de Twitter por parte de Musk ha continuado en los titulares. No ha sido fácil navegar y ha impactado sus otras empresas. Solo el tiempo dirá quién lo reemplazará y si su renuncia como director ejecutivo calmará las aguas de esta plataforma de redes sociales.
*Con información de Forbes US.