Pfizer y BioNTech dieron a conocer un nuevo acuerdo de investigación, desarrollo y comercialización de una posible primera vacuna ARNm para la prevención de la culebrilla o herpes zóster.
Según la información provista, se trata de la tercera colaboración entre ambas empresas: la primera fue para combatir la influenza de 2018 y la segunda para hacerle frente al actual coronavirus.
En esta ocasión, las empresas aprovecharán una tecnología de antígeno patentada e identificada por los científicos de Pfizer y la plataforma de ARNm de BioNTech utilizada en las vacunas contra la COVID-19.
Ambas empresas compartirán los costos, pero Pfizer tendrá los derechos para comercializar la vacuna a nivel mundial, salvo por Alemania, Turquía y ciertos mercados emergentes en donde BioNTech se hará cargo.
En vista del nuevo acuerdo, Mikael Dolsten, presidente de Investigación, Desarrollo y Medicina Mundial de Pfizer, expresó: Pfizer y BioNTech desarrollaron conjuntamente la primera vacuna de ARNm del mundo, que proporciona una herramienta eficaz y bien tolerada para ayudar a abordar el COVID-19, la pandemia más devastadora en un siglo, y demuestra una fabricación constante, ágil y de alta calidad a una escala sin precedentes.
Con este acuerdo, continuamos en nuestro viaje de descubrimiento juntos, al hacer avanzar la tecnología de ARNm para abordar otro desafío de salud maduro para la innovación científica, con el apoyo de nuestra red de fabricación de clase mundial, agregó el ejecutivo.
Por su parte, Ugur Sahin, cofundador y actual director ejecutivo de BioNTech, indicó: La colaboración tiene como objetivo desarrollar una nueva vacuna basada en ARNm contra el herpes zóster, aprovechando la experiencia y los recursos de ambas empresas.
Y concluyó: Nuestro objetivo es desarrollar una vacuna de ARNm con un perfil de seguridad favorable y alta eficacia, que al mismo tiempo sea más fácilmente escalable para respaldar el acceso global.
De acuerdo a los términos del contrato, Pfizer pagará a BioNTech US$ 225 millones en pagos iniciales, incluido un pago al contado de US$ 75 millones y una inversión de capital de US$ 150 millones.
A su vez, BioNTech podrá recibir pagos futuros por hitos regulatorios y de ventas de hasta US$ 200 millones y le pagará a Pfizer US$ 25 millones por la tecnología de antígenos patentada por la compañía.