Hace pocos días, una ingeniera en software argentina narró una situación que le tocó vivir en un evento crypto organizado en Europa. “Escuché al menos a dos personas afirmar que seguro 'la mayoría del público femenino en este evento no entiende nada de crypo'”, contó en sus redes sociales. Y agregó: “Los prejuicios. Habrá que seguir de(construyendo) espacios”.
La industria crypto es reciente en la historia de la humanidad. El lanzamiento de bitcoin fue en 2009, por lo que “aún está en pañales”, como le gusta decir a varios emprendedores tecnológicos. Sin embargo, el sector no escapa a ciertos patrones instalados en gran parte de la sociedad. Y la disparidad de género es uno de ellos.
Paula Monticelli tiene 29 años y es co-founder y CMO de CryptoMate, una startup argentina que trabaja con empresas e instituciones para que se beneficien de la crypto economía. “La primera dificultad que noto es que el mundo financiero fue creado y liderado por varones”, cuenta a Forbes Argentina quien también es profesora de blockchain.
En diálogo con este medio, Monticelli reflexiona sobre el espacio que tienen las mujeres dentro de la industria crypto, cómo es emprender en la Argentina y qué recomendaciones le daría a una persona que se encuentra en su lugar.
-¿Hay disparidad de género en la industria crypto?
-Lo que hay es poca referencia de mujeres. Y a mi también me pasa como líder o co-founder de una startup. Si hoy leo un libro de finanzas, la mayoría relata experiencias de hombres. Cuesta pensar en el derrame hacia abajo para que más mujeres tomen el liderazgo.
-¿Cómo podría cambiar ese panorama?
-Algo importante es fomentar espacios en las finanzas y en la tecnología, otro ambiente con una fuerte estigmatización de que es 'para varones', algo que es complejo de pensar porque no hay muchas mujeres. Mientras más mujeres seamos, más posibilidades de que haya una mayor inserción en cualquier ámbito. Desde líderes, mandos medios, C Levels, etc. De todas formas, en cripto y blockchain, y esto es algo que valoro mucho, lo que ocurre es que al ser una comunidad grande e internacional, hay menos perjuicio para todos. No importa el país, el tono para hablar, la religión o el género. No se antepone ninguna cuestión de la persona al tema que interesa, que es blockchain.
La creación de Cryptomate
Paula Monticelli explica que el gen emprendedor siempre estuvo en su familia. “Mi padre es emprendedor, por lo que durante mi educación observé todo lo que implica serlo”, afirma. “Hay un mix entre la tecnología y ser emprendedor. Por lo general, escuchamos decir que lo que tenemos en las manos ya es viejo porque la tecnología evoluciona constantemente. Y tener una actitud proactiva y estar en constante evolución justamente es parte de ser emprendedor”, continúa.
-Uno de tus últimos emprendimientos es Cryptomate. ¿Cómo surge?
-Durante mucho tiempo trabajé haciendo consultorías para lo que se conoce como “ciudad inteligente”. Fue ahí que tuve mi primer acercamiento a la tecnología blockchain. Fue por el año 2018 y en ese momento no era tan tangible y no estaba en la agenda pública o laboral. Con el tiempo empecé a tener mucho contacto con el mundo digital y luego de varias charlas me asocié con Alan Boryszanski, uno de los fundadores de Lemon, y a Guido De Luca, quien trabajó en PayPal. Entre los tres nos combinamos para crear algo nuevo partiendo de la base de que la tecnología mejora el modo en el que hacemos las cosas. Y lo enfocamos más en el mundo corporativo, porque veíamos que algo faltaba ahí con respecto a la tecnología blockchain.
-¿Cuándo nace la empresa?
-La empresa nace en junio del 2021. En ese momento la pensamos como una compañía B2C y más como un exchange. Pero en el mundo de las startups es común tener que pivotear el producto para ver qué funciona mejor. Yo soy profesora en Coderhouse también y ahí tengo mucho contacto con públicos distintos que dialogan de diferentes temáticas. Es ahí que uno se va dando cuenta que el consumidor es quien se apropia del producto y qué es lo que hace falta en el mercado para tener una mejor propuesta de valor.
-¿Cuál es el nuevo modelo?
-Este modelo de negocios lo tenemos desde marzo. Lo que hacemos es brindar infraestructura cripto para que cualquier compañía se beneficie de la economía cripto. A través de APIs (Interfaz de programación de aplicaciones) damos la posibilidad de realizar transacciones con facilidad desde el propio sistema de la empresa. Esto aplica tanto para una startup que quiera incorporar esta tecnología hasta un e-commerce que busque sumar esta opción como plataforma o medio de pago. También hay otras opciones internas como puede ser el pago de nóminas o para tener balance y hacer stacking para beneficiar a la economía de la empresa.
-¿Cuál es su objetivo?
-Queríamos ver cómo podíamos hacer para que una empresa tradicional tome este concepto y se sume a lo que se conoce como Web3. Si hace 20 años yo le decía a alguien que se haga un email, me podía llegar a responder '¿para qué?'. Luego, fue una herramienta fundamental para la Web2. Bueno, ahora pasa lo mismo y los nuevos emprendedores ya lo traen con más fluidez. Nosotros queremos que las empresas tradicionales también lo puedan aplicar y tener los beneficios de la Web3 sin tener que dialogar con ella que quizás es lo más difícil.
-A principios de año anunciaron inversiones por US$ 1.5 millones. Luego el mercado cayó y muchas empresas crypto incluso cerraron. ¿Cómo están ustedes en ese contexto?
-Estamos bien. Hay mucho capital de financiamiento para empresas con desarrollo sobre Web3. Lo que se conoce como Smarts Investor donde se busca un match entre el inversor y la propuesta de valor porque de fondo eso genera más valor agregado. Sobre todo porque hay empresas en el portfolio de esos inversores con las cuales también podes interactuar. Inversores ángeles siempre hay pero nosotros optamos por Venture Capitals.
-¿Hay un proceso de purificación también?
-La plata sale más cara por la crisis, las empresas están más exigentes y eso hace que haya un proceso de purificación. Pero también hace que las empresas que sí tienen una propuesta de valor agregado trabajen más duro, quieran quedarse y pongan todo para llegar.
-¿Quiénes son sus principales clientes?
-Especialmente todo lo que es fintech. Procesadores de pago, pagos y remesas, nóminas para pagos de sueldos. Por lo general, tienen un conocimiento profundo de la parte financiera y hacer el salto a cripto es más fácil. Para aquellas que no lo tienen, hacer el salto es como que venga alguien de un día para el otro y te pida que corras 21 kms de la nada. Además, en el caso de las fintechs también es lo que está en auge porque la inclusión financiera es muy alta y se desprende de la necesidad de las personas ya sea por querer mantener el valor de sus activos, ser un early adopter o simplemente por curiosidad.
-¿Y las empresas tradicionales?
-Sí, los bancos también están buscando formas de llegar al consumidor final. Hay propagandas con productos digitales de bancos tradicionales por todos lados. Pero nunca hay que olvidar que hay que ofrecer algo que sea innovador. Lo que nosotros vemos es que en los próximos años se expandirá. De hecho, tenemos partners para que aquellas empresas sin sistema y puedan incorporar el servicio cripto que damos nosotros. En algunos casos, tener sistemas puede ser muy sofisticado.
-¿Podrías dar un ejemplo?
-Una agencia de marketing por ejemplo. Podrían tener estos medios para realizar pagos. Sobre todo porque no tienen límites geográficos y una transferencia bancaria internacional es cara y lleva tiempo. En lo que se refiere al cambio a la Web3, el camino es grande, no tiene techo y dentro de la industria está todo por hacerse. El terreno es súper fértil y cada vez hay más emprendimientos.
Formarse en crypto
-¿Cuál es tu formación?
-Mi estudio de base es ingeniería industrial, por lo que tengo una alta dosis de formación tecnológica y de ciencia. Esa formación fue en una estructura muy tradicional, sobre todo porque fue en una universidad pública donde, por ejemplo, los planes de estudio son difíciles de actualizar. Pero tener una base en matemática y física hizo que la inserción al mundo tecnológico sea más sencillo. Desde chica tuve computadora y tuve facilidad para aprender. Con el tiempo, puede combinar todos esos intereses tecnológicos con las ganas de cambiar y mejorar el modo en el que viven las personas.
-¿Por qué decidiste emprender?
-Nunca dudé que era por acá. En 2017 viajé a Francia para realizar un Máster en administración de negocios. Cuando volví, trabajé en una empresa que se encuentra dentro de la industria del consumo masivo y noté una gran diferencia entre lo que había aprendido y cómo se hacían las cosas. Me llevó un tiempo descubrirme como profesional porque ese trabajo no me convencía. Entonces, empecé a emprender y en 2018 lancé una agencia de marketing digital enfocada en las redes sociales. Era algo que me gustaba y en ese momento era más innovador que ahora, que ya está más establecido.
-¿Cómo ves al país en relación a la industria crypto?
-Lo veo muy robusto. Específicamente porque las empresas invierten en el capital intelectual que hay en la Argentina actualmente. En Latinoamérica en general hay mucho auge por lo crypto. Aunque en la Argentina no solo por lo cripto sino también por la tecnología blockchain. Porque lo bueno de entenderlo es que te permite usar muchas aplicaciones y no solo criptomonedas. La capacidad cultural que tenemos para entender blockchain tiene mucho potencial de cara a cualquier configuración tecnológica del futuro. Incluso para mejorar las instituciones públicas, que hoy no están las herramientas y quien pueda ponerle cabeza a todo eso pero es un ámbito en el cual se puede implementar esta tecnología.
-Mencionaste que también sos docente. ¿Notas disparidad de género en esos espacios?
-Hace dos años que soy docente y la realidad es que es parejo la cantidad de hombres y mujeres. Quizás lo que se nota es que en cursos más blandos, como marketing, hay más mujeres y en los relacionados con blockchain se nota más presencia masculina. Pero creo que también tiene que ver con una apertura hacia el tema. Tengo amigas que no saben para qué estudiar eso y yo les digo que para entender lo que viene.
-¿Cuáles son los casos de uso que destacas para crypto?
-Le veo mucho potencial en lo que es Internet of Things (IoT), que es la capacidad de que un aparato se conecte a Internet y que haya una retribución por eso. Eso es algo que se viene con los NFTs y el metaverso. Que usar un producto te genere una ganancia y creo que nuestros productos de Cryptomate podrían asociarse. El otro día hablaba con una colega que tiene una empresa de eSports y veíamos la posibilidad de que Adidas te venda un NFT de su zapatilla, te mande su zapatilla y que entre más las usas, más tokens o beneficios te genera. Va a pasar tiempo para que eso pase pero no es algo que esté exento en el próximo metaverso.
-¿Estamos cerca del metaverso?
-El metaverso como tal no está todavía. Está en construcción y la tecnología está menos desarrollada en relación a lo que se necesita. Pero las marcas de lujos ya están todas pensando en el metaverso. No solo en un marketing en redes sino de mercado. Porque el mercado está donde se mueve la gente y si es en el metaverso, el camino es ese.
-¿Qué le recomendarías a un emprendedor que también está en tu situación?
-Suena muy trillado pero que haga lo que le guste. Es difícil llegar lejos si haces algo que no te gusta. Emprender es un modo de vida y se hace algo cotidiano. No es que cierro a las 18 hs y no me acuerdo hasta el próximo día. Si no te gusta lo que haces, es difícil que lo sobrelleves porque tiene mucha carga mental. Y por otro lado, estudiar y capacitarse en todos los ámbitos. Ya sea técnico o soft skills.