MetaDocs es un proyecto NFT que asigna avatares virtuales a médicos influyentes para ofrecer un servicio de consultoría médica a los pacientes, a través de sesiones de preguntas o mensajes directos, un sistema que ha sido criticados por profesionales de la salud que dudan de su efectividad.
Se trata de un proyecto puesto en marcha en diciembre de 2021 y llevado a cabo por un grupo de médicos famosos en TikTok e Instagram que nació como solución para limitar la "burocracia" del sistema médico actual, según ha indicado recientemente esta agrupación a través de Twitter.
La fundadora de MetaDocs es la Dra. Sina Joorabchi, que, según recoge BuzzFeed, espera que este servicio se convierta en una clínica virtual en el metaverso y ampliar sus servicios en un futuro. Esta opción ofrecería a los pacientes la oportunidad de ponerse un traje háptico y ser examinados en remoto por un profesional especializado en realidad virtual (RV) al comprar uno de estos NFT.
El precio de estos NFT aún no está determinado, aunque según un documento técnico al que habría tenido acceso BuzzFeed, rondaría entre los 0,2 Ethereum (ETH), lo que equivale a US$ 570. En principio, estos tokens no fungibles, que reciben el nombre de MetaDoc, se lanzaron en diciembre y albergan una serie de médicos famosos que cuentan con una gran cantidad de seguidores en las redes sociales, hasta 70 millones.
Entre ellos se encuentran la doctora Pimple Popper, Sandra Lee, con 15,5 millones de seguidores; o el cirujano plástico Dr. Richard Brown, que tiene una notable popularidad en TikTok, con 7,5 millones de seguidores en su perfil.
Gozar de un nivel de reconocimiento como este en las redes sociales parece ser uno de los aspectos esenciales para formar parte de este proyecto, ya que hasta ahora no se han determinado cuáles son los requisitos mínimos para formar parte de MetaDocs.
Los médicos que tienen su propio NFT invitan a los posibles pacientes a entrar en contacto con ellos a través de mensaje directo y en sesiones grupales, con más usuarios, donde se les pueden plantear diferentes cuestiones. Sin embargo, a pesar de que podría ser una forma de acercar la atención médica a los pacientes y que agilizaría los procesos de espera, MetaDocs ha sido criticado por parte de la comunidad médica, principalmente porque no tiene licencia como servicio de telemedicina.
Debido a eso, los médicos que conforman este programa de telemedicina no podrían realizar legalmente estas consultas ni hacer diagnósticos, prescribir recetas u ofrecer asesoramiento médico personalizado a aquellos que adquieran un NFT de MetaDocs.
Por su parte, Joorabchi cree que el valor de este sistema reside en la conexión que ofrece entre las personas con los médicos "para que puedan hablar y conectarse" y cree que su esencia "no es solo la atención médica". Entre algunos de los datos que aporta BuzzFeed que harían desconfiar de este sistema a los usuarios más escépticos destaca que algunos de los presuntos profesionales que ejercen la medicina en MetaDocs aún no habrían terminado su formación académica.
Además, presenta un mecanismo basado en fichas que reciben los propietarios de los NFT por cada día que posean estos tokens. Estos se pueden canjear por tres niveles de "experiencias" con médicos, desde mensajes directos hasta videollamadas. Por otra parte, según se explica en la página web de este servicio, los titulares de NFT recibirán "descuentos en ropa seleccionada, productos de cuidado personal, pruebas médicas y suplementos para la salud".
Por el momento, MetaDocs planea ofrecer servicios de teleasistencia sanitaria a principios de 2023 y planea realizar "exámenes completos" de la salud en un futuro próximo, según la creadora de esta iniciativa. Los miembros del proyecto, además, planean lanzar diferentes "clínicas virtuales" que serán accesibles para aquellos "países del tercer mundo desatendidos", según se apunta en el denominado libro blanco del proyecto.
Críticas desde sus inicios
A pesar de que MetaDocs planea expandir sus servicios más adelante, lleva recibiendo críticas por parte de profesionales y expertos de la salud desde sus inicios, en diciembre de 2021. Estos han acusado a los médicos del proyecto de aprovechar el interés creciente por el universo de las criptomonedas, traficar con ellas y beneficiarse económicamente de los usuarios.
Por su parte, la profesora de ética tecnológica de la Universidad de Notre, Dame Elizabeth Renieris, ha asegurado que MetaDocs podría crear incentivos peligrosos y distorsionados, tanto para médicos como para pacientes. "Si se está incentivando a los médicos a unirse a este proyecto en función de sus seguidores o generando ganancias a los poseedores de los NFT, es difícil reconciliarse con la ética de la atención", ha apuntado la docente.
Renieris también ha insistido en que este sistema podría desdibujar las líneas entre un médico que brinda información general y un consejo médico personalizado para cada paciente. "Es previsible que muchas personas acepten la información que escuchan, independientemente de si es un comentario constructivo o no", ha declarado.
Con información de Europa Press.