Las primeras comparaciones entre la COVID-19 y la gripe estacional eran muy simplistas, lo que llevó a que se discutiera el tema más en detalle para marcarle las claras diferencias entre las dos enfermedades al público. Sin embargo, aunque los síntomas no son exactamente iguales, la coincidencia puede dificultar el diagnóstico. A los expertos les preocupa que la combinación inédita entre la gripe y la pandemia de coronavirus complique todavía más a un sistema de salud que no da abasto.
Para prevenir esos problemas, un grupo de investigadores de la Universidad de Texas en Austin está desarrollando un sensor capaz de distinguir entre la COVID-19 y la gripe buscando ambas en un mismo test. Esta investigación es financiada con una beca de la Fundación Nacional de Ciencias de EE.UU. para acelerar el proyecto y apoyar la salud pública antes de que comience la temporada de la gripe en EE.UU.
El sensor, hecho de grafeno, es diminuto: tiene las dimensiones aproximadas de una tarjeta micro-SD. Los investigadores lo desarrollaron con ese tamaño para poder leer los resultados en una laptop o un celular.
“Nos imaginamos que se pueda usar en casa para que el usuario se autotestee”, afirma Deji Akinwande, miembro del equipo de investigación y profesor del departamento de Ingeniería Eléctrica e Informática de la universidad.
El equipo ya colaboró en el desarrollo de un biosensor hecho de grafeno que identifica deficiencias de hierro en los niños detectando la presencia de una proteína, la ferritina, que es la principal fuente de hierro almacenada en las células.
“Súper material”
En los últimos años, la industria de la tecnología calificó el grafeno de “súper material” y se proyecta que tendrá un papel protagónico en el futuro de la tecnología por sus propiedades únicas ? es “más fuerte que el acero y más delgado que el papel”?, que lo vuelven adecuado para crear un biosensor.
El grafeno tiene solo un átomo de espesor. Esa delgadez extrema lo vuelve muy sensible a lo que tiene alrededor. “Para que un dispositivo sea lo suficientemente sensible a una biomolécula específica ?por ejemplo, la ferritina?, necesitamos preparar el grafeno 'infundiéndolo' con anticuerpos”, afirma Akinwande.
El nuevo sensor es parecido al de ferritina, pero en vez de anticuerpos, tendrá dos canales de grafeno ?uno preparado para anticuerpos contra la COVID-19 y otro, con anticuerpos contra la gripe. Al detectar unos u otros, cambiará la conductividad del grafeno, lo cual se podrá leer desde una laptop o un celular. Los científicos esperan que el sensor brinde un diagnóstico “en minutos”.
Como el test se hará en casa, los investigadores suponen que sería más fácil hacerlo analizando una muestra de saliva, pero también evalúan usar muestras de sudor o hisopados nasales. Por ahora, están trabajando en probarlo para asegurar que sus resultados sean exactos.
“Nuestra meta inmediata para los próximos seis meses es obtener un prototipo y seguir probándolo en el invierno boreal, cuando se anticipa que coexistan ambos virus y haya mucha demanda de diferenciación de diagnósticos”, afirma Akinwande.
Autora: Allison Gasparini