Un estudio de un equipo de investigadores de la Universidad de Nueva York encontró que la vacuna Johnson & Johnson de una sola aplicación es mucho menos efectiva para prevenir las infecciones por coronavirus de la variante Delta y otras formas mutadas del virus que de las cepas anteriores. Se trata de un hallazgo preocupante, dado que la variante Delta ahora representa casi todos los casos de Covid-19 de los Estados Unidos.
El estudio, que no ha sido todavía revisado por pares, se basó en pruebas realizadas con muestras de sangre extraídas de personas que han recibido las tres vacunas contra el coronavirus aprobadas para su uso en los Estados Unidos.
Según el New York Times, los hallazgos son consistentes con revisiones anteriores del desempeño de la vacuna AstraZeneca similar contra la variante Delta, que encontró una tasa de eficacia de alrededor del 33% para la aplicación de una sola dosis.
Los ensayos clínicos sitúan la eficacia de la vacuna J&J en alrededor del 66% contra la cepa de coronavirus original, mientras que las vacunas Pfizer y Moderna de dos aplicaciones fueron más del 90% efectivas.
La directora de los CDC, Rochelle Walensky, dijo recientemente que la variante Delta ahora representa alrededor del 83% de todos los casos de Covid-19 en los Estados Unidos.
Los hallazgos de los estudios de la Universidad de Nueva York contradicen estudios anteriores más pequeños publicados por Johnson & Johnson, que sugirieron que la vacuna era eficaz contra Delta y otras variantes nuevas.
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Los autores del estudio sugirieron que los receptores de J&J podrían requerir aplicaciones de refuerzo para una mejor protección contra la variante Delta, pero los funcionarios de salud pública no recomiendan refuerzos para ninguna vacuna en este momento.
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Más de 13 millones de estadounidenses recibieron la inyección de dosis única de Johnson & Johnson, según los CDC. En realidad, el número representa solo una pequeña porción de alrededor de 161,5 millones de estadounidenses que han sido completamente vacunados.
El aumento de casos, hospitalizaciones y muertes en los Estados Unidos está alimentando las preocupaciones sobre otro aumento importante de Covid-19. Numerosas ciudades y localidades ahora instan a todos los residentes a usar tapabocas en público nuevamente. Sin embargo, la gran mayoría de los afectados no han sido vacunados, lo que llevó a Walensky a decir recientemente: "Esto se está convirtiendo en una pandemia de no vacunados".
La vacuna Johnson & Johnson ha tenido varios informes de problemas desde que recibió la aprobación en febrero. En abril, el gobierno federal de los Estados Unidos recomendó una pausa de 10 días en la aplicación de las vacunas de Johnson & Johnson mientras investigaba los vínculos con un problema grave de coagulación de la sangre. Otro problema surgió a principios de este mes, cuando se informó que la vacuna podría aumentar el riesgo de un trastorno neurológico llamado síndrome de Guillain-Barre.
Los casos tanto del síndrome de Guillain-Barre como de la coagulación sanguínea después de la vacuna J&J han sido extremadamente raros, pero los problemas han sido suficientes para disminuir la confianza del público en la vacuna en comparación con las otras inyecciones disponibles en los Estados Unidos.
*Publicada en Forbes US
