Se acerca el Día de San Valentín y el fraude de pagos autorizados continúa disparándose a nivel mundial este 2024. De esta manera, es sumamente importante que la comunidad que lucha contra el fraude comparta ideas sobre la mejor forma de proteger a las víctimas e identificar a los perpetradores de las estafas románticas. En este contexto, BioCatch; empresa especializada en fraude digital y lavado de dinero impulsado por la inteligencia biométrica del comportamiento, comparte una guía para proteger a los clientes bancarios vulnerables de las actuales estafas románticas.
Las estafas han experimentado una importante transformación en los últimos años, en paralelo a la dinámica de nuestra existencia digital, y evolucionando con nuestras preferencias y canales de comunicación. También se han diversificado significativamente, expandiéndose más allá de las formas tradicionales para abarcar una gama más amplia de tácticas engañosas.
En una estafa romántica, por ejemplo, se convence a la víctima de transferir fondos a una persona con la que cree tener una relación sentimental. Los estafadores crean perfiles fraudulentos para centrarse en víctimas potenciales, iniciando una conexión que pretenden fomentar durante un período prolongado. Después de ganarse la confianza de su objetivo, el estafador fingirá una situación difícil y solicitará ayuda financiera. Independientemente del contexto, estos planes engañosos pueden tener consecuencias muy graves y angustiosas para las víctimas, afectándolas tanto financiera como emocionalmente.
Estafas en cifras
En América Latina, el 75,29 % de los delitos digitales afectan al sector financiero, según datos de Registro de Direcciones de Internet de América Latina y Caribe (LACNIC). Además, según datos de BioCatch, los casos de estafas financieras aumentaron un 19 % a nivel mundial en 2023.
De igual manera, datos del Informe sobre el estado de las estafas de GASA en el mundo 2023 revelan que las llamadas telefónicas (61 %) y los mensajes de texto (58 %) surgieron como los canales de comunicación de estafas más frecuentes. En particular, los estafadores utilizaron predominantemente Facebook y WhatsApp como plataformas preferidas. Y, de manera alarmante, sólo el 59% de las víctimas denunciaron las estafas a las autoridades.
Detección de estafas románticas: ¿cómo podemos defendernos?
La creciente frecuencia de estafas, incluidas las de tipo romántico, ha intensificado las demandas de los consumidores y las entidades gubernamentales para que las instituciones financieras mejoren las medidas de protección y ofrezcan compensación automática a las víctimas. Esto ha generado preocupación sobre la posible carga financiera que se podría imponer a estas instituciones.
El desafío radica en las complejidades de las estafas románticas, que son notoriamente difíciles de detectar y prevenir. Las víctimas a menudo se encuentran completamente inmersas en la personalidad inventada del estafador, por lo que todo aparenta ser normal. Utilizan sus dispositivos habituales para realizar transacciones, están en sus lugares habituales y todo parece plausible de acuerdo a los controles bancarios tradicionales que analizan puntos de datos básicos.
Más allá del conjunto estándar de señales digitales, los datos demográficos también pueden resultar útiles para las instituciones financieras. Un estudio reciente de Shattering Gender Stereotypes in Scam Awareness and Education, realizado por Javelin Strategy & Research (grupo asesor líder especializado en pagos, banca digital, fraude y seguridad), muestra que los hombres tienen casi tres veces más probabilidades (73%) de ser víctima de una estafa romántica en comparación con las mujeres (27%).
"El primer paso crucial en la educación sobre estafas es dejar muy claro que las víctimas no tienen la culpa y con esto fomentar un mayor número de demandas sobre estos delitos", dijo Tracy Kitten, directora de Fraude y Seguridad de Javelin Strategy & Research. Cuando se trata de estafas románticas, o cualquier estafa, los bancos deben desempeñar un papel fundamental en la educación y protección del consumidor. Esto inicia cuando los bancos comprenden los hábitos de los diferentes grupos demográficos y cómo los delincuentes los atacan. De esta manera ayudan a sus clientes a reconocer las actividades riesgosas que los hacen vulnerables.
BioCatch comprendió hace algún tiempo que se necesitaba un enfoque más integral para combatir las estafas románticas. En lugar de centrarse únicamente en el comportamiento de la víctima, las instituciones financieras también deben examinar los comportamientos sospechosos conocidos y exhibidos por los estafadores.
BioCatch destaca 7 señales de alerta para las instituciones financieras ante posibles fraudes.
* Inicio repentino de cuentas.
* Comportamientos típicos asociados con las cuentas mula de destino (cuenta bancaria que se utiliza como intermediario para mover fondos ilícitos de una fuente a otra, en un intento de «limpiar» el dinero y hacer más difícil su rastreo)
* Búsqueda de pagos entrantes de alto valor.
* Inicios de sesión frecuentes y apresurados.
* Uso de servidores proxy VPN.
* Disparidades entre las direcciones SIM e IP.
* Presencia de aplicaciones riesgosas.
"Las estafas románticas son particularmente crueles y a menudo devastadoras para las víctimas, dejándolas con el corazón roto y cuentas bancarias vacías. Asimismo los métodos de detección existentes no son suficientes para detectar este tipo de estafas", dijo Thomas Peacock, Director de Inteligencia de Fraude Global. Por lo tanto, es hora de considerar un enfoque diferente como la Biometría Conductual para entender cómo se comportan los estafadores e identificar a los malos mucho más fácilmente que a las víctimas potenciales. Los bancos pueden aprovechar esta innovadora tecnología para empoderarse y tomar medidas certeras para evitar que las víctimas pierdan el dinero que tanto les cuesta ganar.