Cuáles son las tres características psicológicas que tienen los que se suben con mayor rapidez a la inteligencia artificial
Mark Travers Psicólogo estadounidense egresado de la Universidad de Cornell y la Universidad de Colorado Boulder.
Mark Travers Psicólogo estadounidense egresado de la Universidad de Cornell y la Universidad de Colorado Boulder.
Un artículo reciente publicado en Telematics and Informatics saca a la luz un descubrimiento crítico: el grado en que los individuos satisfacen sus necesidades psicológicas fundamentales de autonomía (control sobre las propias acciones), competencia (sentirse eficaces en las tareas) y relación (conexión con los demás) influye un papel sustancial en la formación de sus opiniones sobre la inteligencia artificial.
El estudio empleó el marco de la Teoría de la Autodeterminación, que sugiere que los entornos que apoyan el cumplimiento de estas necesidades psicológicas básicas pueden conducir a una mayor motivación intrínseca, bienestar y funcionamiento óptimo. Además, los hallazgos de la investigación establecen que satisfacer estas necesidades puede promover sustancialmente actitudes favorables hacia la IA, siendo la competencia y la relación particularmente influyentes.
"En nuestro estudio, descubrimos que nuestros deseos de sentirnos capaces, conectados y en control influyen en nuestras opiniones sobre la inteligencia artificial", dice Jenna Bergdahl, investigadora del proyecto UrbanAI de la Universidad de Tampere en Finlandia. "Estos sentimientos, que también se conocen como necesidades psicológicas básicas, pueden determinar si termina por gustarnos o no la IA".
Para comprender la conexión entre las necesidades psicológicas y la actitud hacia la IA, los investigadores realizaron dos estudios que examinaron las actitudes hacia la IA basándose en la teoría de la autodeterminación y las necesidades psicológicas básicas (autonomía, competencia y relación).
En el primer estudio realizado en seis países europeos, descubrieron que una menor satisfacción de estas necesidades estaba relacionada con actitudes más negativas hacia la IA, mientras que la competencia y la relación fomentaban actitudes positivas. Para los finlandeses, la autonomía también jugó un papel importante en las actitudes positivas hacia la IA.
En el segundo estudio con participantes finlandeses, observaron que una mayor autonomía y satisfacción con las relaciones interpersonales conducía a actitudes de IA más positivas y menos negatividad.
Además, encontraron efectos consistentes de la autonomía, la competencia y la relación en la reducción de la negatividad hacia la IA, y los individuos que perciben una mayor autonomía y competencia muestran menos negatividad y más positividad hacia la IA.
El estudio enfatiza que las necesidades psicológicas básicas, especialmente la competencia y la relación, influyen significativamente en las actitudes positivas hacia la inteligencia artificial en seis países europeos. Si bien la competencia y la relación afectan constantemente las actitudes positivas hacia la IA, el impacto de la autonomía varía, especialmente en Finlandia, lo que resalta la naturaleza única de las actitudes hacia la IA en comparación con la aceptación de la tecnología tradicional.
Por lo tanto, esta investigación aborda una brecha al explorar la conexión entre las necesidades psicológicas y las actitudes de la IA, enfatizando la importancia de reconocer nuestra "humanidad" innata y sentirnos como seres dignos, capaces y autónomos frente a una IA que a veces se ve como un rival que nos supera.
Las conclusiones clave del estudio se pueden condensar en los siguientes puntos:
Las personas que se sienten capaces, conectadas y en control tienden a tener actitudes más positivas hacia la IA. Específicamente, aquellos que creen que pueden usar la tecnología en sus propios términos, como los encuestados finlandeses, tienden a ver la IA de manera más favorable.
Para aprovechar el potencial de la IA de manera efectiva, es crucial reconocer las diversas perspectivas y preocupaciones que la gente tiene sobre esta tecnología.
Al garantizar que se satisfagan las necesidades psicológicas básicas de los individuos cuando interactúan con la IA, podemos mejorar la aceptación y el uso de estas tecnologías de maneras más flexibles y productivas.
Cuando se le preguntó cómo las organizaciones que están implementando tecnologías de IA en sus operaciones podrían mejorar el compromiso, la satisfacción y la aceptación de los empleados de los cambios impulsados por la IA en el lugar de trabajo, el autor recomendó el siguiente enfoque de dos pasos: Primero generar confianza en los empleados y luego crear un entorno de relación entre los usuarios de IA
"En general, las organizaciones pueden mejorar el compromiso y la aceptación de la IA alineando las estrategias de implementación de la IA con los principios de la teoría de la autodeterminación. Al abordar las necesidades psicológicas de competencia, autonomía y relación de los empleados, las organizaciones pueden fomentar un entorno positivo y de apoyo para adoptar cambios impulsados por la IA", concluye el autor.