Es cierto: Blockchain se ganó su fama gracias a las criptomonedas. Pero los beneficios que ofrece esta tecnología transaccional se aplican a muchos otros usos y sus beneficios ya se aplican para la exportación de carnes y la explotación vinícola, entre muchas otras industrias. 

Al ser adoptada por las empresas, la cadena de bloques permite compartir datos entre entidades de manera veloz y segura, solucionando problemáticas operativas y contables. Además, elimina a los intermediarios, al tiempo que ofrece una mayor transparencia sobre el historial de las transacciones y la trazabilidad en los procesos. 

Al contar con una estructura descentralizada, Blockchain permite compartir datos dentro de un ecosistema de negocios en el cual ninguna entidad única tenga el control exclusivo. Así, entidades o participantes que no se conocen pueden intercambiar datos con confianza. Por otro lado, al permitir la verificación de identidad y establecer términos vinculantes, genera las condiciones ideales para configurar contratos inteligentes, que se ejecutan automáticamente en base a los términos y condiciones escritos en el código. 

Entre las organizaciones en la Argentina que ya están explorando los beneficios del Blockchain se destacan los organismos públicos, que la usan como base para “contratos inteligentes”; las entidades financieras, para sus tareas de compensación y liquidación, y las instituciones del sector de la salud, a quienes les resulta particularmente útil tanto para garantizar la seguridad y la privacidad de la información de los pacientes, como para la trazabilidad de los medicamentos. Otros usos también aplican a industrias como la de seguros, por ejemplo, que puede implementar la cadena de bloques para su proceso de reclamos o registro de siniestros.

En sectores como manufactura, logística y comercio minorista es interesante lo que Blockchain puede aportar a la gestión de la cadena de suministro y la trazabilidad de bienes. En especial, porque permite verificar la autenticidad de los productos. Una aplicación concreta de esto en nuestro país es su utilización para el proceso de exportación de carnes en el que permite la identificación individual de cada animal desde el inicio del proceso de producción hasta que el producto envasado llega a destino. ¿Cómo? Gracias a la creación de un NFT o Token no fungible de cada vaca. Y lo mismo sucede con los granos que se cosechan en nuestros campos para el mercado internacional.

Otro caso innovador implementado en Argentina es la tokenización de la producción de una viña, en donde cada botella producida en una cosecha se asocia a un token, que incluye información del proceso de siembra, crecimiento y cosecha de la viña. Así funciona la Tokenización de la producción de vino de una viña: en función de la cantidad de botellas de vino producidas, se emiten tokens. Al comprar estos criptoactivos, se obtiene la propiedad de cada botella. Estamos ante un caso concreto de la industria 4.0.

Por sus ventajas, está claro que se trata de una tecnología que llegó para quedarse, aunque hay tres grandes barreras que impiden su adopción de forma generalizada. La primera es el contexto socioeconómico nacional, que ralentiza su implementación en pos de otros temas de agenda que urgen. Por otro lado, demanda contar con procesos totalmente digitalizados. Y en tercer lugar, el desconocimiento de los beneficios que ofrece esta tecnología por parte de ciertas firmas, en especial de las PyMEs.

Claro: la tecnología Blockchain también es aplicable a una pyme. Luis Medel, SSH Regional VPO de Banca y Finanzas en Softtek, explica que para evaluar su implementación, cualquier líder de una organización debería evaluar si realmente tiene alguna necesidad que no pueda resolverse implementando una base de datos tradicional: 

“Para abordar este análisis, podemos preguntarnos si en nuestro caso hay múltiples actores que escribirán información en un repositorio común, o si necesitamos compartir información con participantes en los que no confiamos, o si requerimos cierta verificación en nuestros procesos. Cualquier respuesta afirmativa a estos interrogantes nos dará la pauta de que estamos ante un caso en el que el uso de Blockchain es factible”. Pero Medel advierte que el análisis no debe reducirse a un cortoplacismo: “Es importante visualizar los beneficios que esta implementación aportará a la organización, los cuales no podrían obtenerse con tecnologías tradicionales”.

Blockchain podría favorecer, además, el desarrollo de nuevos modelos comerciales. Según el referente de Banca y Finanzas de Softtek, “para ciertos sectores presenta grandes oportunidades con modelos de negocio que involucran la entrega de información a otros participantes que no son parte del consorcio. Por ejemplo, las entidades financieras deben realizar una verificación de identidad a través de la aplicación de procesos llamados KYC (Know Your Customer) que deben cumplir, localmente, con estándares regulados a nivel global. Se podría aquí crear un Consorcio Blockchain KYC en donde participen las instituciones financieras que quieran adherirse, y con el BCRA actuando como entidad regulatoria, se implemente una plataforma corporativa nacional e-KYC que registre la verificación de identidad de los clientes”.

En esa línea, unas 80 organizaciones públicas y privadas crearon en el país la Blockchain Federal Argentina (BFA). Se trata de una plataforma multiservicios abierta y participativa pensada para integrar servicios y aplicaciones sobre blockchain, en la que puede participar el sector público, privado, académico y la sociedad civil.

Resulta importante observar también lo que está sucediendo en la región, con iniciativas como LACChain (alianza global integrada por diferentes actores del entorno blockchain, orientada al desarrollo del ecosistema en América Latina y el Caribe) y AUNA (iniciativa chilena de inversión conjunta entre la Bolsa de Santiago y el Depósito Central de Valores), entre otras.

Perspectivas a futuro

 

La tecnología está siendo adoptada a buen ritmo en América Latina. Según el informe “Estado del arte del Blockchain en la empresa española”, elaborado por Ametic, las empresas de la región ya invirtieron unos 77,1 millones de dólares en esta tecnología, y la perspectiva indica que se mantendría un crecimiento sostenido hasta el 2023 en torno al 45%, momento en que alcanzaría los 232,9 millones de dólares. 

En combinación con otras tecnologías como la Inteligencia Artificial y el Big Data, el Blockchain promete alcanzar logros titánicos influyendo en los más diversos sectores, tales como energía, fintech, logística, salud y gobierno (por mencionar solo algunos). Una estimación internacional de la firma PwC indica que esta tecnología tiene el potencial de sumar 1,8 mil millones de dólares a la economía mundial para el año 2030. Por su parte, otro estudio global prevé que en la industria manufacturera esta tecnología crezca a una tasa del 73% entre 2022 y 2026.

La consultora Deloitte también advierte que habrá que tener al Blockchain bajo la lupa, ya que incluso podría alentar el desarrollo de nuevos modelos comerciales a medida que avance la transformación digital en las empresas.