A medida que la IA generativa sigue captando la atención del mundo de la tecnología, otro gigante de Silicon Valley salta a la escena. El martes, Salesforce reveló un nuevo servicio de IA llamado Einstein GPT, un bot similar al popular ChatGPT, pero dirigido a empleados en entornos corporativos.
Einstein GPT se integrará con el CRM de Salesforce. El bot permitirá a los usuarios teclear instrucciones para generar resúmenes de clientes, correos electrónicos personalizados, textos de marketing o códigos. El software también puede crear imágenes, como cabeceras promocionales, para que las empresas las utilicen en sus campañas.
Para el servicio, Salesforce se asoció con el fabricante de ChatGPT, OpenAI, lo que permite que el modelo se nutra de la versión empresarial de ChatGPT, así como de otras fuentes que incluyen información pública y datos de Salesforce. Los clientes también pueden entrenar a Einstein GPT utilizando los datos de su propia empresa.
El martes, la empresa también anunció una nueva aplicación de ChatGPT para Slack, la popular herramienta de productividad de la que Salesforce es propietaria. La empresa realizó los anuncios en TrailblazerDX, la conferencia anual de Salesforce centrada en los desarrolladores que se celebra en San Francisco.
La noticia llega en un momento en el que el revuelo en torno a la IA generativa sigue creciendo y las empresas se apresuran a integrar la tecnología en sus operaciones. Desde que ChatGPT despegó tras su lanzamiento en noviembre, la IA ha sido el tema más importante en tecnología. El mes pasado, Microsoft se asoció con OpenAI para integrar su tecnología de chatbot en Bing y Google también ha lanzado un competidor de ChatGPT llamado Bard, por ahora sólo en pruebas iniciales.
Es mucho lo que está en juego para hacerlo bien, especialmente en un contexto corporativo. En sus inicios, empresas como Google y Microsoft han sido objeto de escrutinio por las respuestas generadas por sus chatbots de IA. La empresa matriz de Google, Alphabet, perdió 100.000 millones de dólares de valor de mercado el mes pasado después de que su Bard diera una respuesta incorrecta sobre la NASA durante un vídeo promocional de un producto. Por su parte, Microsoft se enfrentó a las críticas después de que su chatbot Bing empezara a generar respuestas violentas y obsesivas, cuando periodistas y los primeros probadores intentaron poner a prueba los límites del software.
Salesforce dijo que había incorporado barreras de seguridad al exigir que un usuario humano diera el visto bueno a una respuesta generada por Einstein GPT antes de utilizarla. Por ejemplo, si un empleado quisiera utilizar el chatbot para generar un correo electrónico, primero escribiría una pregunta. A partir de ahí, pueden refinar el contenido escribiendo otro prompt, como "hazlo menos formal". Cuando el usuario esté satisfecho, puede hacer clic para pasar el contenido a un correo electrónico.
"Aprendemos cuando nos equivocamos, y el modelo se actualiza solo", dijo Jayesh Govindarajan, vicepresidente senior de ciencia e ingeniería de datos de Salesforce, durante una rueda de prensa.
El martes, la empresa también anunció un nuevo fondo de 250 millones de dólares de Salesforce Ventures, el brazo inversor de la empresa, para startups de IA generativa. Entre las beneficiarias se encuentran las prometedoras Anthropic, Cohere, Hearth y You.com.