Hay dos opciones a la hora de invertir en whisky: botellas y barriles. Bastante sencillo, ¿verdad? No tanto. Cada opción tiene sus pros y sus contras. Acá tenés cinco cosas que hay que saber antes de invertir en whisky.
Sólo los barriles cambian el sabor con el tiempo
El sabor y los aromas del whisky evolucionan constantemente mientras están en el barril. No ocurre lo mismo cuando se embotella. Una vez que el whisky entra en una botella, prácticamente permanece igual de forma permanente.
El whisky envasado en barrica adquiere los sabores deseados porque la madera es porosa. Las barricas "respiran" el aire que las rodea, lo que confiere una complejidad adicional al líquido. Por ejemplo, una destilería que esté cerca del océano podría aportar una cualidad ligeramente salobre a su whisky. Como regla general, cuanto más tiempo envejezca un whisky, más valor adquirirá.
El whisky embotellado puede aumentar de valor, pero no debido a la constante evolución de su contenido. El precio depende de la popularidad de la marca y del número de botellas en circulación. Los beneficios potenciales aumentan a medida que una marca se convierte en más popular y las botellas escasean.
Las barricas de whisky pueden ofrecer más opciones para el producto final
Todas las marcas de whisky venden botellas, pero la mayoría no vende barriles.
El predominio de las botellas se debe a la popularidad de las marcas. Para las destilerías más prestigiosas, tiene más sentido embotellar y vender ellas mismas su propio whisky que vender el barril. Dicho esto, el valor de las barricas vendidas en subasta se ha disparado en los últimos años.
Las opciones para el comprador aumentan cuando las marcas embotellan y venden su whisky. Un solo barril puede convertirse en un whisky escocés de 12 años. O su contenido podría terminar en un barril diferente. Ese whisky podría incluso terminar en una mezcla o colaboración. Cada caso es otra etiqueta potencial en la que los coleccionistas pueden invertir.
Podes ahorrar dinero comprando a granel
Cualquiera que haya comprado en Costco conoce el valor de comprar a granel. Digamos que invertís en un barril de 200 litros de whisky americano por 1.500 dólares. Cada barril contiene aproximadamente 266 botellas. Eso significa que cada botella vale unos 6 dólares, lo que le deja mucho margen para revalorizarse antes de venderla.
Las botellas de whisky tienen un precio de entrada por botella más elevado. Si vos sos un coleccionista serio, es probable que gastes unos cientos o incluso miles de dólares por botella. Como resultado, las botellas ofrecen menos por su dinero, especialmente cuando se crea una cartera bien diversificada de activos "líquidos".
Los barriles permiten un embotellado y etiquetado personalizados
El proceso de inversión en whisky es muy sencillo. Invertir. Almacenar. Vender. Esto es válido tanto para botellas como para barriles.
Dicho esto, la venta no es la única estrategia de salida. Muchas personas optan por embotellar y etiquetar de forma privada sus barriles para el consumo. Podés tener tu propio whisky de autor de reserva privada acabado en una barrica única y personalizado con su marca personal. Es una salida que sólo es posible con los barriles, ya que son pizarras en blanco, por así decirlo.
Pero eso no es todo. Su propio whisky de autor hace toda una declaración de intenciones para eventos especiales, regalos de empresa o botellas para compartir con amigos y familiares.
Ambos ofrecen un gran rendimiento histórico
No es ningún secreto que el whisky puede producir rendimientos atractivos. Muchos señalan como prueba de ello el Rare Whisky Icon 100 Index, un índice que incluye 100 de las botellas de coleccionista más emblemáticas. Desde su creación hace una década, el índice obtuvo un impresionante rendimiento del 398%. En comparación, el S&P 500 rindió un 265% con los dividendos reinvertidos en ese mismo periodo (datos a fecha de 8/01/23).
Los datos de rentabilidad de los barriles de whisky son menos abundantes, pero no por ello menos prometedores.
Reflexiones finales
Las grandes opciones de inversión son las que generan los mayores rendimientos con el mínimo riesgo. Los barriles son ideales si tiene una perspectiva a largo plazo y no quiere ocuparse del almacenamiento, el seguro o el envío. La maduración del líquido tiene el potencial de proporcionar rendimientos crecientes año tras año.
Las botellas favorecen la inversión a corto plazo, pero conllevan un mayor riesgo. Hay que saber calibrar los mercados e identificar las tendencias de compra. Además, la popularidad de las marcas puede fluctuar, lo que hace que los beneficios sean menos seguros.
Si después de esto seguís sin decidirte, siempre puede plantearse cubrir sus apuestas con ambas.
Acá tiene información que no constituye asesoramiento financiero, fiscal o de inversión. Tenés que consultar a un profesional autorizado para que te asesore sobre su situación específica.
*Con información de Forbes US
