Por qué la doble titulación multiplica las oportunidades

Comienza a imponerse la tendencia de los posgrados en los que el alumno estudia un tiempo en una universidad local y otro en una extranjera con la validación de dos instituciones prestigiosas.

En un mundo que se transforma a una velocidad nunca vista, es clave no perderse en la carrera. Hace rato que vale la pena sumar al título de grado uno de posgrado; la experiencia cuenta tanto  como la capacitación y tener una visión internacional abre puertas intelectuales y profesionales fundamentales para poder comprender y hacer la diferencia en la lógica de los negocios globales.

La Universidad de Belgrano (UB), por caso, ofrece un MBA con la posibilidad de obtener otro título en las francesas NEOMA Business School, Toulouse Business School o KEDGE Business School. Los argentinos que eligen esta modalidad tienen en general entre 34 y 45 años, mientras que los extranjeros tienen entre 26 y 30 años.

Griselda Lassaga, directora académica del doble diploma de UB, indica que los primeros realizan esta experiencia cuando ya tienen un recorrido laboral. Buscan “completar su formación en negocios globales o profundizar en algún tema específico”. Además de la visión internacional y multicultural, entre los beneficios de las dobles titulaciones se destaca la posibilidad de adquirir una impronta de sostenibilidad que, en países como Francia o España, está muy avanzada.

Una de las argentinas que están dando ese paso es Pía Wild. Al finalizar, obtendrá los títulos en Finanzas y Negocios Internacionales. Desde Múnich explica a Forbes Argentina que tener este tipo de experiencias “permite no solo conocer otro país sino aprender un estilo de liderazgo situacional” y obtener “desafíos organizativos, ya que implica mucha movilidad y flexibilidad. Y no se debe olvidar la red internacional que se puede construir”.

Luego de cursar el MBA durante un año en la UB, Wild continuó en la Toulouse Business School por seis meses. “Los exámenes fueron proyectos grupales en cooperación con diferentes pymes o start-ups. Fue una experiencia cercana a lo que un gerente internacional debe afrontar. El desafío era la colaboración y la comunicación en un equipo intercultural. Se puso mucho énfasis en las soft-skills   y los proyectos se basaron en problemas reales y globales. Terminaré con algunos amigos más y futuros socios comerciales”, destaca. Acaba de iniciar una pasantía obligatoria de seis meses en el departamento de calificación de una organización en Múnich que capacita a firmas “emprendedoras con soluciones económicamente viables, socialmente efectivas y ecológicamente sostenibles”.

Otra de las universidades argentinas que ofrecen doble titulación en posgrados es el ITBA. Entre otras, para la Maestría en Logística de Proyectos de Integración Regional. Su director, Alejandro Arroyo Welbers, explica que el convenio es con la EOI de España, donde los alumnos conocen a líderes de negocios internacionales y aprenden de innovación tecnológica aplicada a los temas de estudio. Así, los alumnos obtienen “no solo conocimiento sobre variados aspectos de la gestión de proyectos en el amplio mundo emergente, sino también una visualización sobre temas de tecnología aplicada y de sistemas de financiación del mundo desarrollado con proyección hacia América Latina y mercados emergentes en general”.

La doble titulación aporta a los alumnos “una visión europea sobre inversiones y proyectos” y una latinoamericana útil para desarrollar la versatilidad necesaria para adaptarse rápido “a los cambios y para gestionar riesgos en una zona siempre desafiante y cambiante”.