La industria deberá hacer un examen de conciencia para adoptar lo nuevo y descartar lo obsoleto, además de replantearse su rol en la sociedad y para con sus clientes.
Por Gonzalo Ketelhohn- Miembro del Directorio de Willis Towers Watson
A raíz del Covid-19, una gran cantidad de industrias y actividades se vieron profundamente afectadas, obligando a las organizaciones a adaptarse a esta nueva situación, o resignarse a perder mercados o peor aún, cerrar definitivamente sus puertas. Algunos de estos cambios seguramente sean pasajeros, pero la mayoría pareciera que han venido para quedarse.
El mercado del seguros tampoco es ajeno a ésta situación y como una industria más, deberá actuar en consecuencia al menos en dos frentes: por un lado, hacer un examen de conciencia para adoptar lo nuevo y descartar lo que se ha vuelto obsoleto. Por el otro, deberá replantearse su rol en la sociedad y para con sus clientes, intentando comprender al detalle por lo que están pasando y cuáles serán sus nuevas prioridades. En un mundo empobrecido y más competitivo, sobrevivirán aquellos que logren acompañarlos aportándoles valor y ayudándolos en la profunda crisis que deben enfrentar. El único modo de lograrlo será estando muy cerca.
RIESGOS DE LA PRODUCCIÓN Y LOGÍSTICA
La matriz de riesgos de las empresas cambió drásticamente, apareciendo nuevas necesidades de cobertura y obligándolas a replantearse esquemas que quedaron obsoletos. Los niveles de ocupación de las fábricas, la dotación de personal y los valores a riesgo por alteraciones de stocks por ejemplo, no son los mismos. Medidas de seguridad alteradas por la interrupción del negocio, caída de ingresos, renegociaciones salariales, mantenimiento de equipos... Hay muchos factores a tener en cuenta para adaptar la estrategia de las empresas frente a un nuevo y más complejo escenario. Deberá encontrarse un equilibrio entre nuevas necesidades de cobertura (como por ejemplo frente a riesgos cibernéticos) y la imperiosa necesidad de reducir costos.
RIESGOS EN LA PRESTACIÓN DE SERVICIOS Y COMERCIOS
Las empresas de servicios y comercios tampoco son ajenas a ésta nueva realidad y debieran ser analizadas por separado. Por un lado, pueden ser las más golpeadas perdiendo hasta el 100% de sus ingresos de la noche a la mañana, imposibilitadas y comprometidas seriamente para mantener grandes infraestructuras de las cuales dependan (imaginemos un hotel, un parque de diversiones o un teatro). Por el otro pueden ser las más flexibles para continuar prestando servicios: por ejemplo un consultor que puede trabajar en forma remota o un comercio incorporar una plataforma de delivery?
Desde un punto de vista de riesgos, con éste cambio de reglas se alteran también factores como la responsabilidad civil de las empresas por sus nuevas actividades o cambios de modalidades de prestación de servicios. La responsabilidad solidaria de Directores y Gerentes no es tampoco un capítulo menor y va de la mano con lo anterior. El crecimiento geométrico de los ciberdelitos y los niveles deficientes de seguridad de las redes sociales que soportan el trabajo a distancia son también preocupantes.
Como aseguradores, comprender en profundidad estos cambios y las nuevas reglas del juego es clave para asistir adecuadamente a nuestros clientes, protegiendo su capital humano, su patrimonio y ayudándolos a potenciar su propio negocio.
RIESGOS DEL TRABAJO
El Covid-19 se considera enfermedad profesional de acuerdo con el DNU 367/20 emitido el día 13/4/2020 por el BO, por lo cuál es importante entender que a las aseguradoras les genera mayor exposición. Por ello no es sencillo lograr ahorros en los contratos salvo que existan otras razones que objetivamente compensen éste riesgo. En algunas industrias, el cambio y la reducción de la actividad obliga a hacer un análisis pormenorizado, que podría resultar tanto en una reducción como en aumento de costos. Además el asegurador debe estar correctamente informado de cualquier modificación en la actividad de los asegurados a fin de poder evaluar correctamente sus riesgos.
Cuál es la situación de los trabajadores de actividades no exceptuadas que no pueden realizar sus tareas desde sus domicilios y suspensiones? Si bien el contrato de ART sigue vigente aun cuando el empleado no esté desempeñando sus tareas y esté en nómina, los accidentes domésticos que pudiera tener no estarán cubiertos salvo exista relación entre el mismo y el trabajo.
Otro tema son las rescisiones por falta de pago de las pólizas. Actualmente están suspendidas, hay quita de intereses y planes de financiación con un mínimo de 60 días para el pago de la primera cuota.
¿Cómo preparo a la empresa para afrontar los nuevos desafíos que me presenta el nuevo mercado laboral? Dependiendo de la actividad de cada empresa, a medida que vaya levantándose la cuarentena, muchas optarán por fomentar el trabajo remoto dado que el mismo presenta muchas ventajas y oportunidades, para lo cual deberán considerar regímenes y modalidades de trabajo diferentes. Para esto será fundamental entender desde ahora el alcance de la cobertura de riesgos del trabajo en estas situaciones y prepararse de la mejor forma posible.
FLOTAS CORPORATIVAS Y VEHÍCULOS PARTICULARES
La circulación de los vehículos ha bajado considerablemente.
¿Qué dice la regulación sobre el impacto de la emergencia sanitaria vigente en relación a las pólizas de los vehículos automotores? La Superintendencia de Seguros de la Nación comunicó que no se ha emitido normativa alguna que obligue a las aseguradoras a aplicar descuentos y/o bonificaciones. Sin embargo, los grandes brokers y productores de seguros están analizando cada caso en donde se justifique una reducción de costos o coberturas por la modificación de la exposición a riesgos.
¿Es recomendable disminuir la cobertura o solicitar un descuento temporario teniendo en cuenta la menor exposición al riesgó Aquí hay que analizar cada caso. No hay una regla general. Obviamente los vehículos que no sean utilizados para circular por tiempo prolongado tendrán un tratamiento diferente de aquellas actividades exceptuadas que siguen utilizándolos.
También es conveniente repasar los planes de afinidad de los empleados para hacerlos más atractivos e intentar reducir sus costos (se están otorgando algunos descuentos a los seguros de vehículos particulares, dependiendo del caso) o mejorar los beneficios (hay coberturas que se han reactivado a raíz de todos éstos cambios). Cuando el volumen y las condiciones acompañan, las mejoras pueden ser sustanciales.
RIESGOS DE LA SALUD Y BIENESTAR DEL PERSONAL
Como consecuencia del trabajo remoto, la división entre el ámbito laboral y el privado es cada vez más difusa. Por ello también resulta oportuno revisar beneficios y coberturas de los empleados relacionados con la salud y su bienestar, así como los costos y las posibilidades que nos ofrecen la combinación de distintos productos y servicios.
¿Qué rol juegan la medicina prepaga y las obras sociales en relación con esta problemáticá ¿Cómo deberían combinarse diferentes mecanismos de protección de las personas en una situación como la actual? En ese sentido la medicina prepaga y las obras sociales juegan un rol clave. Hay cuestiones por mejorar y riesgos que se solapan, máxime considerando el trabajo remoto. Hay también mucho espacio para optimizar coberturas o reducir los costos de las empresas por ineficiencias o burocracias del sistema, la acumulación de aportes no aprovechada dentro de un grupo familiar y la mala administración de recursos en general. Por ejemplo resultan notables los ahorros que se logran en empresas que ofrecen cobertura de medicina prepaga a sus empleados, cuando trabajamos unificando los aportes del grupo familiar de sus empleados, asegurando la recepción de fondos de las obras sociales o revisando que las nóminas de beneficiarios no incluyan personal o familiares que no corresponden.
En el caso de los seguros de Vida Obligatorio el Covid-19 está cubierto, dado que en sus exclusiones no figura muerte por pandemia. Con respecto al seguro de Vida Colectivo, las principales aseguradoras del mercado han confirmado su cobertura, no así para resto de enfermedades pandémicas, ya que algunas de ellas están excluidas. Por ello, hay que analizar caso por caso.
RIESGOS CIBERNÉTICOS
Si al trabajo de forma remota que ha impulsado el Covid-19 le sumamos el avance vertiginoso que han tenido la tecnología y las redes sociales en los diferentes procesos de negocios durante los últimos años y las deficiencias de seguridad que presentan las redes, tendremos una tormenta perfecta!
Esta tendencia seguirá en aumento al igual que los riesgos que conlleva. Las empresas deberán tomar medidas urgentes para protegerse frente a estos nuevos riesgos cibernéticos.
Se escuchan cada vez más temas tan delicados como la divulgación de información confidencial y la filtración de bases de datos de clientes, el hackeo de sistemas operativos, procesos e interrupción del negocio. Fraudes y extorsiones. Daños reputacionales? Son solamente algunas de las consecuencias que puede tener una deficiente política de seguridad informática en un contexto como el actual. Dejarla librada al azar es inadmisible.
CONCLUSIÓN
No hay dudas que esta pandemia nos tomó por sorpresa a todos sin darnos tiempo suficiente para prepararnos. El mercado asegurador no estuvo ajeno a esta situación, y si bien reaccionó relativamente rápido, evoluciona día tras día, corrigiendo el rumbo lo mejor posible a medida que gana en experiencia. No obstante siempre busca beneficiar al asegurado frente a los nuevos escenarios que le plantea la realidad.
Hay empresas que producen bienes y ofrecen servicios que se vieron muy afectadas, debiendo rebuscárselas para sobrellevar este contexto a fin de darle continuidad a su actividad. Y este rebuscárselas muchas veces significa modificar sus procesos y dinámicas habituales, generando cambios en la exposición de sus riesgos.
Como administradores de riesgos es fundamental acompañar a cada uno de nuestros clientes, conociendo en detalle su operación, para poder ofrecerles soluciones que se ajusten a sus necesidades específicas. Estamos preparados para ayudarlos a proteger su capital humano y su patrimonio, de la mejor manera posible.