Día Nacional de la Cerveza: el reino cervecero que nació "en un galpón" de San Fernando
El Galpón de Tacuara pasó de ser un pequeño proyecto entre amigos a un ecosistema de dos locales, cinco franquicias y miles y miles de litros de cerveza. En el Día Nacional de la Cerveza, su fundador cuenta la historia

“Como muchos de los proyectos cerveceros del país, el nuestro nació como un juego. Éramos un grupo de amigos que querían hacer algo todos juntos”, cuenta Gabriel Furnari, cofundador y maestro cervecero de El Galpón de Tacuara. Durante los últimos años la marca ganó popularidad gracias a su ya popular personaje Tacuara, a quien se lo puede ver en las latas que produce la empresa y en los locales distribuídos por Buenos Aires. “Tuvo una gran repercusión en la gente y nos dio mucho alcance cuando nos estábamos dando a conocer”, recuerda Furnari. 

Pero antes de llegar a cómo lograron esa expansión hay que retroceder en el tiempo unos años hasta los inicios de la compañía. Porque hoy, en el Día Nacional de la Cerveza, esos comienzos son un ejemplo perfecto de dos de las características más importantes de esta bebida: la amistad y el encuentro. 

 

Gabriel Furnari, cofundador y maestro cervecero de El Galpón de Tacuara


 

Cómo nació el Galpón de Tacuara 


Por los años 2015 y 2016, un grupo de amigos de San Fernando recibió una gran noticia. Juan, un amigo de toda la vida, regresaba al país luego de vivir 10 años en Canadá. “Cuando regresó al país, nos contó muchas cosas pero una de ellas nos impresionó a todos y era el impulso que estaba tomando en Estados Unidos y Canadá la cerveza artesanal. Justo en ese momento nosotros estábamos con el deseo de producir cerveza para consumo personal con otro amigo que se llama Martín. Por eso siempre decimos que todo esto nace como un proyecto de amigos”, relata Furnari. 

La información que trajo Juan y los deseos de Gabriel y Martin pusieron en marcha un proyecto que, para terminar de arrancar, necesitaba una pata más: la comercial. “Cuando empezamos a desarrollar la idea, incluímos a mi hermano Sebastián porque necesitábamos a alguien con habilidad y conocimiento para el desarrollo de modelo de negocios y la parte económica. Ya habíamos hecho varias cosas juntos, mis amigos lo conocían, vieron lo que podía aportar y también se sumó. En ese momento formamos un grupo de cuatro personas para empezar a gestar la fábrica que hoy es Tacuara”.

Con la idea ya en mente, el grupo buscó un espacio que les permitiera montar una fábrica para producir cerveza y un bar para compartir con sus amigos y vender al público. Al poco tiempo dieron con un espacio ideal en San Fernando y desde allí empezaron a construir la marca. “Arrancamos más que nada como algo personal para producir cerveza. Luego nos dimos cuenta que podíamos sumar una pata de gastronomía y así se fueron dando las cosas. Compramos un buen equipamiento, planteamos la fábrica y en el espacio que quedaba libre fuimos desarrollando el bar. Empezamos con una inversión chica de plata pero grande en cuanto a nuestro tiempo. Llevó 8 meses y aprendimos de todo, a pintar, soldar, termofusionar, etc. Fue un proceso divino desde lo humano por todo lo que aprendimos”, señala Furnari. 

 

Tacuara cuenta con dos locales propios y seis franquicias

 

En ese tiempo el grupo comenzó a desarrollar recetas propias en tiradas de 50 litros que cumplían con sus expectativas. “Al principio era un conocimiento sensorial muy básico. Lo probamos con amigos y básicamente era si era rico o feo. Con el tiempo fuimos aprendiendo y hoy sabemos identificar características que ya estaban en la cerveza pero que nosotros no llegábamos a distinguir”, dice Furnari. Y agrega:  “Cuando finalmente abrimos Tacuara, pasamos de 50 litros a 500 litros de producción, con todos los riesgos que eso implicaba en la escala de las recetas. Por eso, desde el minuto cero pensamos en asesorías y fuimos contactando a expertos para que nos explicaran cómo escalar la producción. Eso fue un acierto porque nos ayudó a arrancar con un muy buen piso tanto en la calidad pero también en todo lo relacionado a los procesos productivos”.

En la actualidad, Tacuara produce entre 40 y 50 mil litros por mes, una cifra que se encuentra lejos de años como el 2019 cuando ese volumen era cuatro veces superior. “No es el mejor momento del sector. La pandemia y la crisis económica fueron golpeando a la industria pero tenemos la esperanza y confianza que va a volver a subir y que quedarán en el rubro aquellos que hacen las cosas bien. Por suerte son muchos los cerveceros que cuidan su producto para que todo el sector siga creciendo”, reflexiona Furnari. 


 

Cómo se encuentra la producción de cerveza en la Argentina


Como relata el maestro cervecero de El Galpón de Tacuara, es un año complicado para la industria cervecera en el país. “Viene siendo un año difícil para el consumo en general. En nuestro caso particular, la cerveza no es un bien de primera necesidad, y el consumo depende de la evolución del salario real, por lo que, si los ingresos sufren, nuestro volumen cae”, comenta desde cerveceria y malteria Quilmes. 

Este análisis es compartido por Nicolás Rubino, Director de Marketing & Negocios Vinos y Sidras en CCU Argentina. “Es un comienzo de año desafiante para todos y particularmente el mercado cervecero sufrió una fuerte retracción, con caídas de doble dígito en los volúmenes, comparado con los mismos meses del año anterior. La industria cayó aproximadamente un 25% vs 2023”, señala Rubino al respecto. 

 

Las empresas del sector cuentan que la industria cayó aproximadamente un 25% vs 2023

 

Este es un golpe fuerte para el sector, sobre todo teniendo en cuenta que la cerveza es una de las bebidas alcohólicas preferidas de los argentinos. Aunque no supera los niveles de consumo en la región. “El consumo per cápita, que es de 45 litros en nuestro país, es bajo comparado al promedio de la región que es de 60 litros, lo que demuestra que la categoría de cervezas todavía tiene mucho para crecer en la Argentina y ese crecimiento va a venir de la mano de innovaciones, nuevas marcas y propuestas, distintas variedades y empaques que resuelvan nuevas necesidades de nuestros consumidores”, indican en Quilmes. 

En este momento de caída del consumo, varias de esas necesidades se relacionan al precio de los productos y por ese motivo las empresas apuntalan a los usuarios con campañas de todo tipo. “Creamos campañas como el Pacto Quilmes, que propuso el precio fijo del litro retornable de la marca por 3 meses y la posibilidad del 'blanqueo de envases'. Es decir, llevar cuatro y recibir una Quilmes de litro a cambio. También la campaña chapitas de Brahma, que permite canjear cuatro chapitas de Brahma por un litro gratis”, cuentan en Quilmes. 

Mientras tanto, en CCU destacan que todas las categorías se están enfocando fuertemente en las promociones. “En primera instancia, con Schneider lanzamos la nueva edición de la lata 473 con una promoción para ganar un viaje a la Copa América. Por otro lado, con el objetivo de cuidar un poco más el bolsillo, bajamos el precio del Latón 710 para dejarlo a $1500. Es una promoción que nos va preparando para vivir uno de los eventos más importantes dentro del mundo del fútbol. La misma estará vigente hasta el 31 de mayo”, subraya Rubino. Y agrega: “En el caso de Miller Geniune Draft, la marca fue parte del gran evento 'Hot Sale' con 50% de descuento en su icónico porrón y 45% en la lata 473 en el e-commerce de La Barra CCU. Por el lado de Amstel, la misma se podrá conseguir en La Barra con un 40% de descuento durante el mes de mayo”.  

 

Apostar por la innovación y la cultura en este contexto 


Aún en un contexto de bajo consumo y de crisis, Furnari tiene esperanzas en la recuperación del sector. Y en el caso de Tacuara, la empresa apuesta a dos de sus principales pilares: la innovación y la cultura. 

La innovación siempre es una característica de Tacuara y hoy seguimos con esa impronta. Siempre, dentro de nuestras posibilidades y las posibilidades de mercado, nos gusta innovar. Hace un tiempo sacamos una birra con terpenos de cannabis porque el lúpulo de la birra y el cannabis son primos e innovamos para fusionar ambos mundos”, relata al respecto. “La manera fue a través de los terpenos porque no tienen psicoactivos y porque una de las características de la cerveza es su aroma y con los terpenos podíamos jugar con otros perfiles aromáticos. Siempre estamos intentando sacar birras nuevas y es un deseo de todos hacerlo porque tenemos una pasión por encontrar uniones entre mundos”.

Algo similar ocurrió con el personaje Tacuara, que hoy se hizo conocido entre quienes son amantes de la cerveza nacional. “Al año de estar vendiendo cerveza nos dimos cuenta que la lata era un segmento muy poco desarrollado por la industria en ese momento. Hicimos una máquina enlatadora y eso nos permitió enlatar en lotes chicos. Luego, invertimos en heladeras y las pusimos en locales apostando 100% al impacto visual. Hicimos un desarrollo de latas que en ese momento fue muy innovador porque la industria venía apalancada en líneas inglesas e irlandesas de colores oscuros. Y nosotros, por toda la información de nuestro amigo Juan, hicimos un desarrollo de marca más americanizado. Ahí nos encontramos con nuestro personaje Tacuara y lo pusimos en situaciones para desarrollar la marca en distintos momentos”, revela Furnari sobre el popular personaje de pelo y barba larga y gafas de sol que aparece en las latas y los locales de la compañía. 

 

Las latas de Tacuara marcaron un hito en la industria local

 

En la actualidad, Tacuara cuenta con dos locales propios, cinco franquicias y una sexta que se está abriendo en Don Torcuato. “Eso nos pone muy contentos porque es un momento de crisis y baja del consumo y que sigan confiando en nosotros es una alegría”, destaca el fundador de la empresa que hoy da empleo a más de 100 personas en todo su ecosistema

De todas formas, Furnari no es ajeno al contexto actual y la situación que atraviesan los consumidores. Por ese motivo, el próximo paso de la marca es crear un espacio cultural en el primer local que desarrollaron. “Siempre fuimos un lugar muy elegido por la comunidad de San Fernando y empezamos a darnos cuenta que en la realidad actual es importante hacer crecer ese espacio. Por eso realizamos acuerdos con comunidades culturales de la zona con el objetivo de llevarle a los clientes una experiencia gastronómica y cultural”, cuenta al respecto. Y concluye: “Todo lo que es eventos musicales y de arte tiene amplia aceptación de convocatoria y se lleva muy bien con la gastronomía. Creemos que en estos momentos de crisis la cultura da la posibilidad de levantarse y que la gente tenga este espacio es algo que nos alegra y nos motiva para continuar”.