Un Premio Nobel, 350 speakers,19 Forbes Summit y un 2022 sin pandemia

La pandemia debería terminar con las vacunas. Podrá haber mutaciones, nuevas cepas y nuevas letras del alfabeto griego. Pero la innovación de los grandes laboratorios y el talento de los investigadores permitieron detener un virus que paralizó al mundo en el 2020 y cuyas secuelas continuaron este año. Habrá que ver, sí, el impacto del Covid en aquellos no vacunados durante este invierno en Europa. También será hora de poner límite a los experimentos sociales llevados a cabo por gobiernos fascinados por la idea de restringir las libertades individuales. Pasó en la Formosa de Insfrán, pero también en algunos estados de Australia, donde obligan a los contagiados a trasladarse a un campo de infectados, y en miles de ciudades de todo el mundo: la locura no tiene fronteras. 


Llega la hora de la desprotocolización. De retomar la normalidad. De dejar de contar casos que continúan sobreestimados, pero sobre todo deberían carecen de relevancia. Las vacunas son muy eficaces para evitar el contagio pero lo más importante: reducen casi a cero las hospitalizaciones y fallecimientos. Se vio con el fantasma de la cepa Delta: aumentaron los casos, pero las internaciones y muertes entre vacunados fueron casi nulas. 

Los medios tendrán un rol central en este nuevo escenario, pero también los líderes que, por temor o enamoramiento, exageran protocolos inútiles que aún sobreviven. Será también 2022 el tiempo de la recuperación económica. En nuestro país, gran parte de la reactivación se ve licuada por una inflación que supera el 50% anual. El acuerdo con el FMI y, sobre todo, la decisión política de contener el déficit y la emisión son el punto de partida necesario para rencauzar la economía en el mediano plazo. No empeorar ya sería un éxito: festejamos los laterales. 

Un sector del kircherismo crítico a Guzmán aún sostiene que el déficit no es tan relevante, que la solución es aumentar más impuestos, controlar “la fuga” (un cuco para el relato que omite preguntarse el origen del problema), y que solo se trata de “agrandar la torta”. Si esta facción gana terreno, el escenario podría ser dramático. Para entender por qué elegimos mal, el economista Andrés Borenstein entrevistó para Forbes Argentina al Premio Nobel Daniel Kahneman, uno de los creadores de la Economía del Comportamiento, cuyos libros Pensar rápido, pensar despacio o el recién lanzado Ruido revelan por qué nuestro cerebro no es tan racional como creemos en el proceso de toma de decisiones. 

También entrevisté a Cass Sunstein, coautor de Ruido y coautor de la teoría y libro Nudge, junto a otro Premio Nobel, Richard Thaler. Su trabajo fue tan relevante que el exprimer ministro inglés David Cameron creó la “Unidad Nudge” en su gabinete para lograr que distintos “empujoncitos” pudieran atravesar la burocracia e impactar en la sociedad a través de acciones concretas. Del mismo modo, fue asesor de Barack Obama y hoy del presidente Joe Biden. 

A lo largo del año, 350 speakers participaron en 19 Forbes Summit, además de una decena de Forbes Talks privadas para cámaras o empresas. En 2022, continuaremos con estos eventos que nos permiten encontrarnos, virtual y presencialmente, y sobre todo reflexionar, descubrir y difundir “empujoncitos”, hallazgos e historias de resiliencia, emprendedorismo e innovación que tanto necesitamos para salir adelante. 
 

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