La entrada al mundo laboral es siempre un gran desafío por conquistar. La falta de experiencia y de conocimiento de lo que sucede dentro de una empresa, son obstáculos que todo joven termina enfrentando. Pero existen oportunidades de demostrar talento y brillar.
Una investigación de ManpowerGroup realizada junto con Junior Achievement Americas, reveló que casi 9 de cada 10 jóvenes argentinos de entre 18 y 29 años tuvieron problemas para encontrar un trabajo en los últimos 12 meses. Estos números colocan a la Argentina cuarto en el ranking Latinoamericano, solo por detrás de El Salvador, Costa Rica y Paraguay.
Entre las principales dificultades para acceder al tan ansiado primer trabajo, aparecen la falta de experiencia laboral, las remuneraciones ofrecidas y la formalidad. Aún así, las posibilidades están intactas. Los empleadores de la región señalan que más del 90% contrató a jóvenes durante los últimos 12 meses. De ese porcentaje, el 87% fue incorporado como personal formal y, entre ellos, al 72% se les ofreció un contrato por tiempo indeterminado. Además, 8 de 10 empresarios encuestados afirmaron que buscan contratar más jóvenes.
Miremos lo que pasa en el mundo de las cadenas de fast food. ¿Cuáles son sus atractivos como puerta de entrada al mercado laboral? Como todo negocio dirigido al consumidor, las cadenas de comidas rápidas ofrecen ambientes de trabajo dinámicos, cambiantes y fuertemente orientados al cliente. Esto favorece el desarrollo de las herramientas socioemocionales como el trabajo en equipo, la comunicación, la empatía y la resolución de problemas, cualidades muy buscadas en todo trabajador.
Por otro lado, la capacitación es constante. La introducción de nuevas tecnologías y metodologías de trabajo, demandan la formación y actualización permanente del personal. Esto tiene un impacto especialmente relevante en el primer trabajo, donde se incorporan muchos aprendizajes y valores que acompañan el resto de la vida profesional. Es la oportunidad para entender qué destrezas son imprescindibles en el ámbito laboral, identificar las propias fortalezas y debilidades, y trazarse objetivos para seguir creciendo. Otro aspecto destacado de las cadenas de fast food como plataformas de empleo joven viene de la mano del modelo de franquicias descentralizadas, lo que propicia la generación de empleo de calidad fuera de la capital y los grandes centros urbanos. Hoy, toda ciudad con más de 80 mil habitantes puede aspirar a contar con su local de fast food de franquicia.
De esta manera, el sector promueve el desarrollo económico y social de forma federal, impactando en las comunidades donde opera. Las cadenas de comidas rápidas reconocen la importancia de fomentar el acceso al primer empleo. Por eso, son una de las industrias que más puertas abre a los jóvenes para incorporarse al mercado laboral formal.
En un contexto de país muy desafiante, las cadenas de comidas rápidas tienen sus puertas abiertas al talento y las ganas de crecer. Además de sus beneficios laborales y de capacitación, poseen el atractivo de insertar a los jóvenes en una verdadera cultura empresarial, con estrategias y objetivos de negocios claros, y un proceso eficiente y de mejora continua. Esto las diferencia de otros primeros empleos tradicionales, siendo la largada de una carrera que se sabe dónde comienza, pero no qué tan lejos puede llegar.
*Por Hernan Patrucchi, Coordinador de RRHH en Mostaza