Un twittero anónimo desnudó la probable estafa de Zoe muchos meses antes que la justicia y que lo difundieran los medios. Chequeó la historia insolvente de sus accionistas, la fragilidad de las distintas empresas que conformaban un presunto holding sostenido por pirámides de cartón.
Y, al mismo tiempo, exhibió como muchos de los principales medios, portales y canales de televisión del país, difundían, a través de contenido pago, los beneficios del mundo Zoe, que ofrecían una rentabilidad del 7,5% mensual en dólares y en la que cayeron miles de incautos.
En Forbes, nos contactamos con el twittero @betomendeleiev, seudónimo tomado de un personaje de Diego Capusotto, y desde el comienzo difundimos los indicios rigurosos que iba publicando en la red social y que fueron el puntal de las investigaciones judiciales que terminaron con pedido de captura de Leonardo Cositorto y lo que, parece, será el derrumbe de este presumible esquema Ponzi.
El branded content o contenido brandeado representa hoy entre un 10% y un 30% de los ingresos de los grandes medios. Pero, aunque sea pago, forma parte del contenido y los medios tenemos la responsabilidad ética de verificar la calidad del contenido antes de publicarlo.
Hace dos semanas, en Forbes Argentina rechazamos dos contenidos brandeados una vez que nuestro staff detectó que el producto que querían difundir podía ser engañoso o inconsistente. Privilegiamos la calidad y el compromiso con nuestros lectores a ingresos por publicidad bajo ese formato que, en el caso de Forbes, siempre se explicita (en televisión, muchos PNT se confunden con entrevistas periodísticas).
Sin embargo, no estamos exentos de equivocaciones. En este caso no fue por una nota paga, sino por la cobertura de un lanzamiento de Universal Exchange, una plataforma que incluye tokens para adquirir Vayo Coins, sobre cuya actividad se difundieron algunas sospechas en las redes sociales. En el evento participaron distintas celebridades y fue difundido en Infobae, Perfil y otros medios, incluido Forbes. En nuestro caso, debimos evaluar si dicho lanzamiento era noticia y eventualmente consignar las sospechas alrededor de la empresa.
Con 105 años de vida en todo el mundo, más de 5 en la Argentina, cuidamos la reputación de Forbes a diario. Y eso incluye consignar errores y disculparnos cuando suceden como en este caso.