El gran desafío de la formalización e inclusión financiera: el intento de Paraguay para resolverlo
Sebastián García Diputado nacional del Paraguay
Sebastián García Diputado nacional del Paraguay
La recientemente aprobada Ley de Servicios de Confianza para las transacciones electrónicas fue solo otro paso de una serie de herramientas jurídicas para dotar al Paraguay de elementos que brinden un marco previsible y seguro principalmente para la ciudadanía electrónica, el intercambio comercial y los negocios digitales.
Paraguay llega como el cuarto país a nivel mundial en adoptar un texto basado en la Ley Modelo de la Comisión de las Naciones Unidas para el Derecho Mercantil Internacional (Cnudmi) sobre documentos transmisibles electrónicos del 2017 (Mletr) y el primero en toda Latinoamérica, adelantándose a sus vecinos más avanzados.
La identificación electrónica, la firma electrónica, el sello electrónico, el sello de tiempo electrónico, el servicio de entrega electrónica certificada, la autenticación de sitios web, además del documento electrónico y el documento transmisible electrónico ya tienen validez jurídica en el país con la nueva ley N° 6822 de los Servicios de Confianza para las Transacciones Electrónicas, plenamente vigente y reglamentada.
Gracias a este avance, toda la interacción entre personas físicas, jurídicas y Estado puede ser realizada de manera electrónica. Desde la firma de contratos, facturas y pagarés, que podrán ser enviados incluso vía whatsapp, tendrán la validez jurídica equivalente a la presencial, al igual que trámites con instituciones Estatales, pues la identidad electrónica estará certificada para dar formalidad y confianza a los trámites online.
Será de gran beneficio para la ciudadanía en general al poder realizar todo tipo de interacción o gestión con instituciones públicas o entre privados directamente desde un celular. Y tendrá, además, un enorme impacto en las actividades comerciales en general contribuyendo al despegue de la economía digital generando enormes oportunidades de negocios, trascendiendo fronteras y sumado a marcos ventajosos en materia de estabilidad económica y bajos impuestos que ofrece Paraguay.
Paraguay aún tiene un gran desafío hacia la formalización y hacia una mayor inclusión financiera. Debe ser sencillo, conveniente y formal para ser así el camino al progreso y al acceso a más oportunidades, la tecnología es la principal aliada para que eso ocurra.
Una serie de iniciativas de apoyo a la digitalización y a la simplificación de hacer negocios se suman a las ventajas y los atractivos del país para el capital extranjero, como se pudo evidenciar en el evento Invest in Paraguay llevado a cabo en el mes de setiembre con delegaciones de varios países de la región y el mundo.
La ley de servicios de confianza se suma a varias leyes que tienen como objetivo derribar barreras comerciales, generar oportunidades y dinamizar el mercado, en especial el mercado financiero.
Entre dichas iniciativas se menciona a la ley de Empresas por Acción Simplificada (EAS), una herramienta que permite abrir una empresa en forma gratuita en 72 horas, con todos los requerimientos legales; la Ley de Factoraje, que permite la cesión de créditos en forma totalmente digitalizada gracias al Sistema Electrónico de Operaciones Garantizadas donde se registran dichas transacciones; también, una Ley de protección de Datos Crediticios, e incluso un marco moderno para el Teletrabajo
El futuro depara escenarios desafiantes, atendiendo el contexto pos Covid y el marco complejo que atraviesa el mundo.
Paraguay tiene un potencial interesante gracias a su ya reconocida estabilidad macroeconómica, además de un marco ventajoso en materia impositiva y regulatoria para ser un jugador de relevancia en el desarrollo de la región, apuntalando su transformación digital, afianzando el comercio electrónico y ofreciendo mayor competitividad para así proyectarse al mundo como un país de oportunidades.
*La columna fue escrita por Sebastián García, diputado nacional del Paraguay @sebagar8