Diseño accesible: Las bases para ser inclusivos
Geraldine Gamondés Design Director para Americas en intive
Geraldine Gamondés Design Director para Americas en intive
La accesibilidad tiene sentido moral y financiero. Las organizaciones tienen el deber ético de incluir a las personas con discapacidad en sus experiencias digitales. Del mismo modo, la integración de la funcionalidad que sirve a las personas con discapacidad (auditiva, motora, visual, cognitiva y de aprendizaje), a menudo también beneficia a los usuarios sin discapacidad. Por lo tanto, las cuestiones que hacen que el contenido sea accesible pueden optimizar las experiencias de todos los usuarios en general.
Desde un punto de vista comercial, ser accesible significa evitar costosas modificaciones en el futuro. Las regulaciones sobre accesibilidad son cada vez más estrictas y las empresas se enfrentan a multas elevadas por no cumplir con las especificaciones. En 2021, se presentaron 2352 demandas de accesibilidad contra sitios web, lo que supuso millones de dólares en sanciones para las empresas.
El diseño inclusivo simplemente tiene que ser parte de la estrategia de las empresas para avanzar. No solo garantiza que la mayoría de las personas puedan aprovechar los productos y servicios, sino que también fomenta una mayor innovación en el desarrollo.
La accesibilidad implica que personas de todas las capacidades puedan encontrar, navegar y utilizar un sitio web, producto o servicio. La accesibilidad pone un gran énfasis en satisfacer las necesidades de las personas con discapacidades, sin embargo, también involucra un mejor diseño y funcionalidad en general.
Las pautas de accesibilidad están establecidas en lo que se conoce como WCAG, donde se establecen los parámetros técnicos para construir plataformas accesibles, enfocándose en que el contenido sea perceptible, operable, comprensible y robusto.
El diseño puede dictar la experiencia de un usuario. Cambia la forma en la que se interactúa con un espacio, cómo se maniobra a través de él y se cómo se lo entiende. Para que cualquier producto o servicio transmita realmente su valor, el diseño debe democratizarse.
Diseño accesible y buen diseño son sinónimos. La accesibilidad se superpone inherentemente con las mejores prácticas como el diseño web móvil, la independencia del dispositivo, la interacción multimodal, la usabilidad y el diseño para SEO. Al tomar medidas para integrar la accesibilidad en el diseño, las empresas mejoran igualmente la calidad de su diseño en su conjunto. Es ganar-ganar.
La accesibilidad también fomenta la innovación en el diseño. Los diseñadores tienen la tarea de equilibrar las medidas accesibles y la estética, además de trabajar con diversas personas para realizar pruebas de usuario. En última instancia, la accesibilidad proporciona una perspectiva más integral del proceso de diseño, lo que abre las puertas para que los diseñadores experimenten con soluciones más novedosas.
La base del diseño accesible se encuentra en las tres c: color, contraste y contenido. Abordar estos elementos no hará automáticamente que un sitio web o una aplicación sean completamente accesibles, pero son las áreas mínimas que los diseñadores deben priorizar cuando se trata de impulsar la inclusión.
Hay una serie de cuestiones que sientan las bases de un diseño inclusivo y accesible, y son las siguientes:
Cada vez más personas se incorporan al redil tecnológico, y los diseñadores tienen la emocionante responsabilidad social de mantenerlos allí, así como de mantener su comodidad.
*La columna fue escrita por Geraldine Gamondés, Design Director para Americas en intive