CTO: los nuevos rockstars de las startups
Gustavo Brey Docente de la Licenciatura en Gestión de Negocios del ITBA
Gustavo Brey Docente de la Licenciatura en Gestión de Negocios del ITBA
El rol del director de tecnología o CTO (del inglés, Chief Technology Officer) es una posición hoy muy relacionada a startups tecnológicas, cuya demanda se asocia -más que nada– a la industria financiera en todas sus áreas; pero va desde neo bancos, criptos, inturtech (seguros), hasta el agro. Con la pandemia este rol recibió una gran visibilidad en materia de inclusión financiera y el ecommerce, por lo que cada vez resulta un perfil más buscado y que, no solo hay pocos, sino que por el momento hay pocas universidades que actualmente los formen.
El repentino viraje hacia la virtualidad evidenció que existen espacios para incorporar startups tecnológicas que resuelvan problemas diarios con la tecnología. Es por ello que el cargo de CTO ofrece mucho a futuro y que seguramente crecerá en otras industrias tales como salud, logística, educación y telecomunicaciones.
Ante un rol tan inminente surgen algunos interrogantes. ¿Cuáles son las tareas que incluye el rol dentro de una organización? Las principales actividades de un CTO tienen que ver con la visión tecnológica del producto, de asegurar que se consigan los objetivos de negocio, que los equipos de ingeniería y/o proveedores estén calificados, de desafiar al producto que se está construyendo y asegurar la confiabilidad del mismo; como así también las finanzas de inversión y operación del día 2.
Existen algunas dificultades para cubrir estos roles que giran en torno a la disponibilidad de talento y las tareas, ya que estas demandan un gran porcentaje del tiempo. Si bien, los CTO vienen, en general, de una carrera dura como ingeniería, estos deben manejar muchas variables políticas y culturales de la empresa escalando los equipos de producto, operaciones, marketing y obviamente tecnología. Es así, que en muchas ocasiones un CTO termina teniendo más responsabilidades en la práctica que un CPO (chief product officer, o encargado de producto), COO (chief operating officer,o director de operaciones); hasta incluso que un CEO (Chief executive order, o jefe Ejecutivo).
Hoy en el exterior está de moda buscar CTOs en la Argentina. Esta tendencia se da porque es el país de habla hispana con más Unicornios, que claramente formaron muchos de los profesionales hoy más demandados. Con una oferta en una moneda más estable, y ofreciendo todo tipos de beneficios; es muy fácil tentar a argentinos a tomar dichos puestos, ya sea para trabajar remotos, como para trasladarse al país donde se lo necesite.
En ese sentido, la formación requerida para el rol depende mucho de la empresa, tamaño, y nivel de inversión. Entre las profesiones más asociadas se encuentran: Ingeniería o Licenciatura en Sistemas/Informática con experiencia en cultura de startup, criterio en la toma de decisiones de arquitectura tecnológica y algún postgrado de negocio y/o gestión ágil de equipos agile.
Otras de las preocupaciones que tienen las empresas tecnológicas, más allá del rol del CTO, tienen que ver los otros roles ejecutivos y operativas por fuera de Ingeniería y Tecnología, es necesario que administradores de empresa, marketing, comercial, abogados, entre otros tengan una visión de producto digital, que entiendan la tecnología que hoy los apalanca, que puedan aprender a crear con la tecnología, que se apalanquen en el análisis de datos, la programación y hasta los nuevos paradigmas en los negocios como blockchain.
En este aspecto, comienzan a aparecer carreras universitarias y programas ejecutivos que lo toman de manera profesional: uno de los casos es el ITBA que cuenta con las Licenciaturas en Gestión de Negocios y Analítica Empresarial y Social, opciones que combinan una formación tecnológica con conocimiento del mundo de los negocios.
Sin embargo, no quedan dudas de que hay que trabajar en los aspectos educativos para tener más talentos. Si bien, hace 2 años se hizo mucho esfuerzo desde la industria y gobierno para formar programadores, hoy tenemos muchos programadores, pero en su mayoría juniors sin la experiencia necesaria. Tarde o temprano aparecen CTOs, por lo que vale la pena considerar su formación