Cómo fue cambiando la industria que hoy tiene el 2% del PBI de la Argentina

Los envases no son sólo contenedores, son el primer vínculo que establecemos con el producto. Conectan, generan identificación, y, cada vez más, deben responder al desafío de un futuro sostenible. 

En nuestro país, esta industria representa el 2% del PBI, genera más de 400 mil empleos en unas 4 mil empresas y mueve 3 mil millones de dólares al año. 

El envase está en todos los segmentos productivos. Desde el transporte de granos, donde se utiliza lo que llamamos big bags, bolsones que pueden verse en el campo, hasta la industria autopartista. Todo tiene embalaje o envase para llegar al hogar, a la estantería del comercio o para posibilitar exportaciones. Todo producto necesita ser contenido para moverse en la cadena de producción y distribución. 

En ámbitos como la alimentación o la farmacología, además, son el reaseguro que nos permite consumir sin riesgos, optimizar el uso de las raciones y evitar desperdicios significativos.

Este pujante sector es parte de un mundo que va cambiando y entonces se vuelve muy dinámico por varios motivos. Las nuevas tendencias de consumo - como las generadas por el furor de las compras online desde la pandemia - requirieron envases especialmente diseñados. Hay mucha ingeniería para que los productos lleguen en buenas condiciones en esta era del delivery

 

La estética también va cambiando y atravesando modas. Más allá de la funcionalidad, el envase es una herramienta para estimular cognitivamente a los clientes mediante efectos visuales como el color y la forma. La industria cosmética es un gran ejemplo de eso. Sólo hace falta pensar en las grandes marcas de perfumes y ver el despliegue de diseño, con permanente renovación.

Las últimas tecnologías son otra parte importante de la evolución del sector. Pronto, seguramente, veremos IA en la producción de los envases. Estamos viviendo una instancia comparable a la que, en su momento, produjo la llegada de la informática a los procesos industriales. 

Si bien hoy hay predominio del papel y del plástico, son muy numerosos  los materiales que integran nuestra industria, como vidrio, madera, hojalata, aluminio. En los últimos años, el 80% de la producción de los embalajes de cartón provino del reciclado. Incluso, los árboles que se utilizan para obtener papel son plantados especialmente para este fin, no se trata de bosques nativos.

 

Y en esto la industria promueve cambios. El cuidado del medio ambiente se volvió imperativo para el mundo y es una tarea en la que todos debemos colaborar. Por eso en el Instituto estamos generando un sistema de gestión voluntaria por el cual las empresas serán responsables de fomentar y dar disposición final a sus productos, generando un reciclado posconsumo. 

Ya hay numerosos casos positivos, como las botellas de PET con las que se hacen flejes o fibras para tejidos. Es necesario generar procesos para que los envases vuelvan a tener vida, no alcanza con poner las cosas dentro de un contenedor verde.

Ya estamos participando en capacitaciones a municipios y cooperativas, con una comisión de Medioambiente que se ocupa primordialmente de eso, de la interacción con legisladores. Y esta variable también es decisiva a la hora de entregar los premios "Estrella del Sur", con el que incentivamos a innovar y a desarrollar cambios que conduzcan a mejores y más sofisticados envases para la industria nacional. 

 

*Jorge Acevedo, Director Ejecutivo del Instituto Argentino del Envase