El eslogan del último Coloquio de IDEA generó un intenso debate entre empresarios, políticos y directivos en Mar del Plata y también en las redes sociales. Los críticos sostenían que priorizar la palabra ceder justificaba o contribuía a la visión anti-empresaria que tienen un sector de la sociedad y del arco político. Como si ayudara a reforzar los estereotipos y llegar a conclusiones del tipo los empresarios son los responsables de la inflación y, sobre ese diagnóstico, aplicar recetas estériles como el control de precios. A este malestar se le sumaban la imprevisibilidad generada por los desórdenes de la macroeconomía y las anomalías constantes, desde los controles de tipo de cambio o de importaciones hasta la carga impositiva.
En defensa del lema, Daniel Herrero, presidente del Coloquio, explicó que ceder es dialogar, es escuchar al otro, y a partir de ahí buscar soluciones. El ex CEO de Toyota está convencido de que el caso de éxito de la automotriz japonesa y su vínculo con sindicatos y gobiernos puede replicarse a todas las industrias que necesitan un traje a medida.
La mayor síntesis quizás se produjo en un panel de economistas en el que Hernán Lacunza apuntó: Podemos tener matices en las visiones, pero lo que hay que consensuar es el rumbo y estoy seguro de que ahora estamos todos de acuerdo para dónde ir. Soy optimista. Aun si se llegara a un consenso sobre el rumbo, este se diluye cuando se trata de desarmar privilegios, subvenciones y anomalías de todo tipo. En ese sentido, Marina Dal Poggetto advirtió que no es tan sencillo y no soy tan optimista, sobre el impacto social que tendría en la sociedad avanzar con todas las reformas necesarias y pendientes.
Acaso este es el nudo central que hoy desafía a los líderes de la oposición: comparten el rumbo, pero la discusión está en la velocidad y el impacto que tendrá corregir la
macroeconomía. En su nuevo libro, el expresidente Mauricio Macri sugiere máxima velocidad porque entiende que hay un clima social distinto ante una inflación que a fin de año promete llegar al 100%. ¿Cuánta resistencia puede oponer una sociedad dispuesta a que el ajuste siempre lo haga el otro? ¿Con cuánto consenso contará el
nuevo gobierno para implementar medidas de estabilización y transformación?
Horacio Rodríguez Larreta aseguró que se necesitarán 100 horas y no 100 días para explicar dónde estamos y a dónde queremos ir. Parece el candidato mejor perfilado
del PRO para la elección general, pero las PASO serán todo un desafío. Y, como Cristina Fernández de Kirchner en su momento, aún resulta una incógnita la eventual candidatura del propio Macri. Hace unas semanas, me crucé con el ex presidente durante su gira por España, a donde fue a dar una conferencia en la Universidad de Salamanca. Antes de despedirlo, le pregunté si estaba listo para volver a la tormenta. Espero ser lo suficientemente inteligente para no volver a ninguna tormenta, me dijo. Fue una respuesta suficientemente inteligente.